Canarias, examinada al detalle

Coincidiendo con el regreso de un equipo canario a la élite del waterpolo español, el constante trabajo de Jesús Cuartero y Luis Arostegui en la Federación ha permitido poner las bases de un futuro prometedor

Una jugadora en un partido de Liga / ALFREDO RUPÉREZ

El waterpolo canario está en auge. Seis años después, vuelve a contar con un equipo en la máxima categoría, el Automotor Canarias Echeyde. Desde que el Martiánez renunció a la división de honor en 2011 por problemas económicos, el waterpolo canario no había tenido presencia en la máxima categoría del waterpolo español. Además, este año ha vuelto por la puerta grande, organizando la Copa del Rey y con el Echeyde luchando por consolidarse en la actual liga Premaat.

La vuelta a la elite del waterpolo canario ha sido una gran noticia. La línea de trabajo desde la Federación Canaria, con Jesús Cuartero y Luis Arostegui al frente, ha dado sus frutos y augura un futuro próspero. Pero aún hay trabajo por hacer. Una forma de radiografiar la situación actual del waterpolo canario es mirando el número de licencias actual y el repartimiento de las mismas. El informe “Estudio de género waterpolo Canarias” lo refleja a la perfección.

De un total de 482 licencias, un 92% son para los deportistas, mientras que el 8% restante se reparte entre delegados, técnicos, árbitros y directiva, por ese orden. En cuanto al número de licencias femeninas, no obstante, aún hay deberes por hacer. En uno de los mejores momentos del waterpolo femenino en España, en Canarias es aún una cuenta pendiente. No hay ningún equipo femenino en ninguna de las categorías de waterpolo en Canarias, como tampoco ningún campeonato.

Las chicas, en minoría

El 85% de los waterpolistas en canarias son hombres. En cifras, hay 374 licencias masculinas, por solo 68 femeninas. Eso sí, hay que tener en cuenta que no hay ni competición ni tecnificación alguna paras las waterpolistas en Canarias. La presencia femenina es especialmente destacada en la categoría infantil con 30 licencias y la absoluta, con 18.

El CN Echeyde es el club con más licencias con 116 y con el 26% del total, seguido del CN Metropole, con 85 licencias y el 19% del total. No obstante, es en el CN Reales donde hay más chicas: 54 de los deportistas son hombres, mientras que 20 son mujeres, llegando al 27%. El club con el porcentaje más alto de mujeres es el AD Santa Cruz, donde 20 de los 47 waterpolistas son chicas (un 37%).

El único ámbito donde no hay desequilibrio entre las licencias masculinas y las femeninas es el colectivo arbitral. De los 11 árbitros que hay en Canarias, 6 son hombres y 5 son mujeres. De todos modos, el informe apunta que sí que hay desigualdad entre los que son mesa y los que son árbitros, aunque no aporta datos concretos. En los otros tres campos aparte de los deportistas y los colegiados, la presencia femenina es ínfima. En los cuerpos técnicos y en las directivas es directamente inexistente, mientras que las chicas delegadas suman una cifra testimonial.

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