Fernando Munárriz: «Los ánimos están cada vez más bajos»
El presidente del CDW Navarra habla en WATERPOLISTA.com de la situación actual del waterpolo en la Comunidad, así como que desvela la hoja de ruta que quieren llevar a cabo
El CDW Navarra continúa trabajando para ofrecer la estabilidad necesaria a su actual proyecto deportivo en el que juega un papen fundamental la presencia en Nacional tanto de su primer equipo como del filial. Sobre ello hablamos en WATERPOLISTA.com con el presidente de la entidad de Pamplona, Fernando Munárriz, quien complicado que la situación en Navarra es «muy complicada». En este sentido, a título particular, el directivo considera determinante la continuidad del equipo en Segunda División, puesto que ofrece savia nueva a la plantilla.
– ¿Cuál es la situación actual del waterpolo en Navarra?
«Muy complicado. No tenemos entrenadores. Tenemos pocos árbitros. Por una parte tenemos bastantes equipos en categorías inferiores tanto en equipos masculinos como femeninos, que hace pensar que el futuro está asegurado. Pero el problema real es la carencia de espacios para realizar entrenamientos de calidad. Tenemos que adaptarnos a las instalaciones privadas, con el consiguiente coste y adaptarnos a los horarios y espacios disponibles. Ambos son muy malos pues para poder disponer de piscina completa solo lo podemos hacer cuando cierran las instalaciones y en ese horario (21:30 a 23:00 horas) no podemos hacer entrenamientos de juveniles para abajo. Y algo parecido sucede con las pocas piscinas públicas. Ahora, por ejemplo, con las inundaciones que hemos tenido en Pamplona, no tenemos piscina de 50 metros donde entrenar. Y luego dicen los políticos que la piscina no es prioritaria en Navarra, cuando somos la única Comunidad de España que no tiene piscina pública de 50 metros. Pero también tengo que decir que la incorporación de Imanol Maiza (entrenador del equipo femenino del 9802 a la Federación Navarra creo que va a dinamizar la situación actual por su dedicación y porque le gusta lo que hace. Pero esto se verá en uno o dos años».
– ¿Cómo valoras la evolución que ha protagonizado los últimos años?
«La evolución de los jugadores de casa ha sido muy buena, y todos los años nuestro entrenador Manel incorpora savia nueva de las categorías inferiores. Pero podía haber sido muchísimo mejor en caso de disponer instalaciones adecuadas (como he dicho antes en horario y disponibilidad de piscina completa). Llevamos 14 años en División de Honor y 10 años con el equipo B en Segunda División. En los últimos años dos de nuestros jugadores se han ido a jugar a Cataluña (Alberto y Airam), y claro, eso hace que pese a que sea un orgullo para nosotros pues lo que queremos es potenciar el Waterpolo Navarro, hace que nuestro potencial se vea afectado, pues queremos que el 80 % de nuestros jugadores sea de casa».
– ¿En que situación crees que está el club dentro de la Liga de División de Honor?
«La situación actual es muy delicada. La verdad es que casi todos los partidos conseguimos estar más de la mitad del partido compitiendo adecuadamente pero a partir de un momento del partido no tenemos la suerte de materializar las ocasiones que tenemos y eso nos hace que parezca que la diferencia es mayor que la que debería ser. Tenemos la segunda vuelta para cambiar la dinámica y no me cabe la menor duda que todo el equipo no va a perder el ánimo y lucharemos por ello. Para nosotros (el waterpolo navarro) es muy importante mantenernos».
– ¿Qué supone para el futuro del club la presencia del filial en la Liga de la Segunda División?
«Para nosotros es fundamental. Somos una Comunidad isla dentro del waterpolo. No tenemos posibilidad de hacer entrenamientos de calidad junto con otros equipos pues no hay otro en Navarra. Eso mismo nos ocurre en pretemporada. El tener el equipo en Segunda Nacional nos hace que los jugadores de casa tengan una competición muy exigente y eso hace que si Manel necesita en algún momento apoyarse en jugadores jóvenes, estos ya tengan un nivel competitivo importante y no se note tanta diferencia».
– ¿Cuáles son los principales retos a los que se enfrenta el club?
«Son muchos los retos que tenemos. Sobre todo es asegurar la base. No tenemos entrenadores suficientes para estas categorías, los que tenemos son jugadores del primer equipo y estos tiene también que entrenar y viajar. No hay espacios suficientes. Las categorías entrenan principalmente en tres o cuatro calles y eso no ayuda nada. En definitiva, tenemos que fortalecer las categorías inferiores, que son el futuro del waterpolo».
– ¿Qué valoración haces desde el club de la actual situación de la Liga española?
«La Liga en los últimos años ha mejorado en calidad. Pero cada equipo seguimos a nuestro aire. Nosotros tenemos que competir con un gran desventaja pues las comunicaciones desde Pamplona no son sencillas y los horarios que nos ponen los equipos en Barcelona no nos ayudan en nada. No podemos permitirnos el lujo de viajar el día anterior y dormir en hotel u si nos ponen el partido entre las 12 y las 13 horas tenemos que salir de Pamplona a las 4:30 viajar y jugar. Así es difícil competir bien».
– ¿Qué cosas están por mejorar?
«En Pamplona llevamos más de dos años que no viene nadie de la RFEN a ver un partido y casi ni nos llaman por teléfono para ver que necesidades tenemos, problemas o hablar de la liga. No se cuenta con nosotros para nada, aunque luego se hable de que se quiere potenciar la deslocalización del Waterpolo y que no haya casi solo equipos catalanes. Los ánimos por aquí están cada vez más bajos. No nos sentimos apoyados ni por la Federación, ni por los político ni por muchos medios de comunicación de Navarra. La iniciativa que se ha puesto en marcha para tratar de dar valor a la Liga puede ser buena, pero como siempre pasa y en todos los deportes, los más beneficiados son los equipos grandes. Para los pequeños van la migajas».
– Y a nivel global, ¿del waterpolo en España?
«Creo que a nivel de España se está trabajando bien pues cada vez hay más equipos (niños y niñas) y Comunidades que están apostando por este magnífico deporte. Todo esto me da envidia pues en Navarra no está pasando esto. Esto se notará con el tiempo, pero como también he dicho antes sobre nuestras carencias, lo difícil es tener entrenadores para seguir mejorando y por supuesto buenos árbitros».