Carlota Alonso se aplica al máximo en Estados Unidos
La deportista catalana que hasta esta temporada ha estado vinculada al CN Rubí vive una destacada aventura al otro lado del charco como jugadora del Wagner en la competición norteamericana
Tras haberse formado y madurado en el plano deportivo en el CN Rubí, club en el que se inició a los 10 años, Carlota Alonso cruzó el charco para vivir una nueva aventura en Estados Unidos. «El waterpolo aquí me aporta una nueva experiencia donde estoy conociendo a gente nueva y aprendiendo a entenderme con un equipo nuevo. Mis objetivos son ayudar al maximo al equipo, aportando mi manera de jugar y ganando confianza para plasmar todo lo que he aprendido en Rubí en esta nueva liga«, reconoce a WATERPOLISTA.com la deportista catalana que forma parte del Wagner (NYC). «Mi equipo en Wagner es un grupo muy numeroso con jugadores de distintas nacionalidades. Es un grupo nuevo donde nadie se conocía de antes debido a la pandemia y donde todas somos muy jóvenes y tenemos muchas ganas de aprender a jugar juntas y ganar«, comenta una jugadora que se caracteriza por ser polivalente que siempre busca aportar intensidad al equipo, a través de la contra y los lanzamientos exteriores.
En este sentido, el cambio ha sido grande, ya que según explica el waterpolo en Estados Unidos es «muy diferente». «Desde el arbitraje hasta la forma de confeccionar la temporada, las cuales son muy cortas y concentran un gran número de partidos en pocos meses. La manera de entrenar también es muy distinta ya que los entrenos son mucho más físicos. Además los equipos también cambian bastante ya que juegan 20 jugadoras por equipo y se da mucha importancia a las jugadoras con mas años de experiencia en la universidad», asegura Alonso, la cual desvela la hoja de ruta para esta temporada: «nuestros objetivos como equipo son quedar primeras de la liga de nuestra conferencia MAAC y luego poder conseguir la posición más alta en el campeonato nacional NCAA«, relata una deportista que a pesar de vivir esta experiencia en otro país, guarda un especial cariño al club de su vida, ya que para ella el CN Rubí «siempre ha sido y será como una familia, donde he evolucionado como jugadora y aprendido todo lo que se». «Les agradezco la oportunidad y confianza que siempre me han dado tanto en categorías inferiores como en División de honor, donde me hicieron debutar siendo muy joven y donde siempre me he sentido con confianza por parte del equipo y los entrenadores», concluye.