Andrés Piza se deja la piel por poner su granito de arena en el CN Calviá

Este joven amante del balón amarillo es uno de los integrantes del staff técnico del actual CN Calvia, que lleva ya varios años potenciando la actividad del waterpolo en las Islas Baleares

En la parte occidental de la isla de Mallorca se encuentra la localidad de Calviá, donde un club ya consolidado ha venido desarrollando la actividad del waterpolo con el objetivo de potenciar y promocionar el balón amarillo en las Islas Baleares. Uno de los integrantes de este ambicioso club es Andrés Piza quien después de un tiempo ya vinculado a este deporte, considera que le ha dado «la oportunidad para conocer a gente y aprender muchas cosas que puedo aplicar tanto a mi vida cotidiana como en los entrenos e incluso en mi trabajo». «El waterpolo me ha enseñado muchos valores que he podido aprovechar durante mi vida«, comenta el joven quien actualmente ejerce la función de entrenador en algunas de las categorías del club, particularmente las más jóvenes, ya que lo hace con la intención de «inculcarles las bases del waterpolo«.

| Una evolución real

En todo caso, Andrés explica que para él a título personal, «el Calviá es un equipo en el que me siento como en casa. Somos un club pequeño en el que todos hemos crecido juntos y nos hemos amoldado unos a otros. Siempre ha habido muy buena relación entre entrenadores y jugadores. Es por esta razón que decidí seguir los pasos de mi entrenadora Clara y dedicarme al waterpolo también como entrenador«, explica el técnico, quien desvela que este año tienen equipos «con muchas ganas de jugar al waterpolo». «Con todos los parones, cancelaciones de entrenos e incluso restricciones de contacto en piscinas, todos los jugadores estaban esperando ansiosos el momento de volver a tocar un balón en una piscina. Por otro lado es una pena que no hayamos podido entrenar con normalidad estos últimos meses, puesto que no hemos podido pulir nuestras jugadas y técnica al cien por cien», comenta. la par que explica el día a día de la entidad balear: «el Calviá es un equipo pequeño. Hace unos años era normal que cadetes (e incluso algún infantil) tuvieran que jugar en la liga absoluta de forma que pudiéramos presentar una plantilla completa a los partidos. Ahora, estamos creciendo poco a poco y estamos llenando nuestras plazas con nuevos chicos y chicas que quieren probar este deporte«, asegura a la par que desvela su particular hoja de ruta: «mis objetivos actuales en cuanto a este deporte son muy básicos: hacer que los chicos y chicas a los que entreno aprendan todo sobre el waterpolo, sean capaces de mejorar y esforzarse y, sobre todo, que puedan disfrutar de este deporte como lo hago yo. Claramente, pretendo seguir mejorando como entrenador y atender a cursos para seguir aprendiendo«, concluye.

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