Arnau Fernández mantiene viva ‘la chispa’ por el balón amarillo

Después de vivir una fructífera etapa en las categorías inferiores del CN Terrassa, Arnau Fernández aterrizó en CN Rubí, donde se mantuvo durante dos temporadas. «Allí aprendí de grandes jugadores que actualmente juegan en División de Honor y tuve la gran suerte de conocer y aprender de entrenadores como Nin, Dani y Tiago. En esos dos años aprendí y crecí muchísimo como portero. Aún así, el nivel en la portería de Rubí era muy bueno y me marché a Granollers en busca de más minutos de juego«, reconoce a WATERPOLISTA.com que con ésta vivió ya su tercera temporada en un club donde ha vivido una evolución «ascendente», ya que entiende que «he aprendido de cada compañero de equipo, de cada partido de liga y de cada momento dentro del agua. Sinceramente, espero y deseo que nunca se acabe y pueda dar guerra mucho mas tiempo«, comenta un portero que se caracteriza por tener carácter y ser competitivo, así como «muy ambicioso». «Disfruto cada momento dentro del agua y lo exteriorizo de manera efusiva con cada palabra que digo. Creo que se me hace notar en el campo y muchas veces eso fortalece la ambición del equipo«, puntualiza.

En este sentido, Fernández considera que el waterpolo ocupa hoy día un ligar importantísimo en su vida. «Durante toda mi vida he estado ligado a este deporte, y puedo decir con mucho orgullo que me ha enseñado a crecer como persona, con valores de respeto, cooperación y sacrificio. Este deporte te enseña a plantear la vida como un partido, a veces se gana y a veces se pierde, pero siempre aprece ese aprendizaje que da valor a todo el camino recorrido«, explica un deportista catalán que en cuanto a esta pasada temporada, entiende que «hemos tenido resultados bastantes irregulares pero teniendo en cuenta la juventud del equipo y el cambio de hasta seis jugadores respecto el año pasado es algo lógico. Aun así, creo que este año ha servido para afianzar el grupo y poder dar mucha guerra en próximas temporadas ya que somos un equipo con mucho potencial y ambición«, asegura Arnau que entiende, por otro lado, que lo que hace que CN Granollers sea diferente al resto es «el sentimiento de pertenecer a una gran familia, mucha proximidad con todas las categorias de la sección y con todos los trabajadores y miembros del club«, comenta a su vez un deportista que reconoce que «a estas alturas mi mayor reto es intentar aguantar jugando a waterpolo el mayor tiempo posible. Es mi pasión y algo necesario en mi dia a dia. Así que trabajo diariamente para poderlo compaginar con trabajo y estudios. No es tarea fácil hacer esto, ya que es un deporte muy sacrificado, muchas horas, todos los dias, partidos cada fin de semana, pero al final, esa chispa que se siente al parar un balón, al celebrar un gol o al simple hecho de zambullirse en el agua antes de un partido, da vida. Y creo que es un sentimiento que compartimos todos los enfermos del balón amarillo«, sentencia.

@etoster