Chava Gómez: «Joan Jané sufrió una de las mayores injusticias que ha habido en el waterpolo español»

En la segunda entrega de la sección de ‘Charla con Passion’ nos visita en WATERPOLISTA.com uno de los mejores waterpolistas de nuestro país e integrante de la mejor generación española, con un oro olímpico, entre otros títulos de relevancia. Hablamos de Chava Gómez, ex jugador y ahora entrenador que tras su paso por equipos como CN Martiánez, Real Canoe NC y CN Sabadell, ha venido entrenando en el extranjero. Su última aventura fue en la selección china con quien estuvo en los pasados Juegos Olímpicos de Tokio. Ahora se encuentra en su residencia en Bigues i Riells, y comenta que está a la espera de confirmar su próximo destino profesional. Con él hablamos de mil temas, y él como siempre se muestra con total franqueza.

– ¿Dónde se encuentra Chava ahora mismo?
«Ahora estoy en Barcelona, más concretamente en Bigues i Riells, en mi casa».

– ¿Por qué no estás entrenando a ningún club o selección en estos momentos?
«Estoy a la espera de confirmar mi próximo destino. Hace meses que llegué a un acuerdo pero que por diferentes causas todo se ha ido retrasando. Una situación que se ha alargado demasiado en el tiempo y puede que al final deba cambiar de destino. Por otro lado, Rafa Aguilar me ha propuesto más de una vez dirigir alguna selección de categorías, pero el hecho de estar en el extranjero me ha impedido hacerlo».

– Me da la sensación que todo el mundo se ha olvidado de ti. No hay noticias tuyas por ningún lado. ¿Tienes tú esa sensación?
«Es algo normal. Llevo tres años entrenando en el extranjero. Cuando no estás en el candelero pasas al cajón de los recuerdos. Cajón que rara vez se abre».

– Decía el gran Joan Jané en infinidad de ocasiones que no entendía cómo un entrenador como él, que había competido en innumerables mundiales, europeos y olimpiadas, habiendo conseguido todo para España, no tenía ni una oferta en este país. ¿Piensas lo mismo sobre ti?
«Para mí Joan Jané sufrió una de las mayores injusticias que ha habido en el waterpolo español. Campeón olímpico y doble campeón mundial. Fue a China y consiguió medalla en un mundial, que por cierto es una de las únicas cinco medallas de equipo que el equipo chino ha conseguido en su historia entre mundiales y JJOO. Y sin embargo aquí no había ningún equipo que lo fichase. Si él con todo lo que ha ganado Jané ha tenido que sufrir esa situación, como para quejarnos los demás. Recuerdo que Jané siempre decía para explicar su situación “Hay mucho Kubala por ahí suelto” (Para los más jóvenes hoy bien podríamos cambiar al mítico Kubala por Guardiola o Messi)».

– ¿De qué te ha servido participar en cinco JJOO e incontables europeos y mundiales?
«Seis JJOO contando este último como entrenador asistente de Porobich en China, para ser exactos. Para sentirme orgulloso de lo que hice. Estuve 18 años en el equipo nacional. Más de 500 partidos jugados. Hacía lo que más me gustaba. Me ha servido para aprender mucho de este deporte. Para conocer gente de todo tipo; buena, mala, envidiosa, ambiciosa, generosa… También me servirá para poder contar batallitas a mis futuros nietos. Ahora, si a lo que te refieres es a si me ha abierto alguna puerta una vez que dejé de jugar, te puedo confirmar que no»

– ¿Cuántas veces si es que alguna vez lo has pensado, has dicho “Dejo definitivamente este deporte” ? Si la respuesta es sí ¿por qué no lo has hecho?
«Hace algunos años estuve a punto de desaparecer de este mundillo. Estuve a punto de cambiar de ciudad y de empezar una nueva vida. El problema es que el veneno, waterpolísticamente hablando, reaparece y es muy difícil encontrar el antídoto. Llevo toda una vida respirando cloro».

-La única duda que me viene a la cabeza ahora mismo para que no tengas una oferta con sentido en España, es que seas muy caro. ¿Es así?
«En mi casa siempre me decían que lo barato sale caro. Aún así te diré que no soy caro. Las ofertas que he tenido de equipos de aquí eran proyectos muy diferentes a los que estaba acostumbrado, por lo que decidí ir al extranjero. Quién sabe…quizás me equivoqué. Pero repito, no creo ser caro. Creo que es más un tema de qué tipo de entrenador quiere determinado club, porque como bien sabes hay diferentes tipos de entrenador».

– Quizás los equipos que estén buscando un buen entrenador como tú y no anden muy sobrados de presupuesto, deberían saber que tú vendrías acompañado de un patrocinador privado que cubriría una parte de tu salario, lo que facilitaría tu fichaje. ¿Es así o es una leyenda urbana lo de ese patrocinador privado? Si la respuesta es no, que no tienes ninguno, sería una auténtica pena ya que nuestro deporte necesita cosas así. Cosas excepcionales que podrían llevar a un futuro a ser cosas habituales.
«Lo del patrocinador privado fue como tú dices, pero por la experiencia que tuve nunca más lo haría. Cuando lo presenté llegaron a un acuerdo muy rápido y todos estaban muy contentos. Sin embargo cuando llegó la crisis a la empresa del patrocinador empezó mi pesadilla. No quiero entrar en detalles pero sólo te diré que dicha persona está denunciada en los juzgados por mi familia y no por el tema del patrocinio».

– Sabiendo la situación actual del waterpolo nacional e internacional, salvo excepciones, que no es nada boyante a nivel económico, y viendo tu situación actual en búsqueda de nuevos proyectos ¿Volverías a dedicarte al waterpolo desde tus inicios sabiendo que llegarías justamente al momento actual?
«Es una pregunta difícil de contestar. En ocasiones me digo a mi mismo que volvería a dedicarme al waterpolo, aun sabiendo lo desagradecido que es y no me refiero al waterpolo en sí. Por otro lado, en otras ocasiones al ya saber lo que es llegar al máximo con todo lo que hicimos, me inclinaría más por dedicarme a otra cosa que no tuviese nada que ver con nuestro deporte. ¿Te imaginas un doctor Chava Gómez, un abogado Chava Gómez o incluso un diputado Chava Gómez (risas)?».

– ¿Ha sido mejor el Chava jugador o el Chava entrenador? Si es por títulos está claro pero quiero que dejes de lado esos galardones.
«No se puede comparar pero como no tengo abuela, lo diré yo “Fui muy buen jugador y creo que soy muy buen entrenador. ¿Con fallos? Es obvio. He visto fallos en los mejores jugadores y a los mejores entrenadores del mundo. Lo bueno es reconocer donde fallas, corregirlo y querer siempre mejorar y nunca dejar de aprender».

– Dime los tres equipos dónde más has disfrutado como jugador.
«No podría. En todos los que jugué hubo muy buenos momentos y como es lógico, alguno malo».

– ¿Y el mejor sitio como entrenador?
«Tampoco puedo elegir. En mi primer año en Martianez disfruté mucho. Entramos en los play off e hicimos muy buenos partidos. Fue mi primer año como entrenador y lo disfruté mucho. Fueron grandes recuerdos en Puerto de la Cruz con muy buena gente. Más tarde llegué al Canoe NC donde los socios del club conocían al equipo de waterpolo como “Los funcionarios” y no por nada bueno. Luchaban por eludir la promoción de descenso. Poco después estábamos jugando la final de la Copa del Rey y puntuando contra favoritos al título como el CN Sabadell y el CNAB. Por último y ya en el CN Sabadell ocurrió algo parecido pero diferente (risas). La crisis económica del club obligó a recortar mucho el presupuesto. Se hizo un equipo para no descender e incluso tenía una prima económica por ello. Se recuperaron jugadores ya retirados como el portero Pepe Motos. Un Motos que no había jugado ni un segundo en división de honor. Se subieron al equipo jóvenes de la casa y algunos más que vinieron conmigo. Terminamos quintos esa primera temporada. Poco a poco y con una inversión mínima llegamos a plantar cara al todopoderoso CNAB. De las cinco temporadas que estuve, las tres últimas terminamos en segunda posición de la liga. Con todo esto, como te he comentado al principio, no puedo elegir ya que disfruté mucho en los tres clubes».

– ¿Hay algún jugador en el panorama nacional o internacional que te recuerde por su forma de jugar un poco a ti?
«No me gustan las comparaciones. Yo jugué en casi todas las posiciones posibles, así que te dejo (a un servidor) que digas que jugador de hoy en día te recuerda a mi». Después de mucho pensar y repasar a todos los jugadores top del panorama internacional actual, no he encontrado a ninguno que fuera excepcional tanto en la boya como en el arco exterior (hay varios que sí lo son en defensa de boya y en el arco). Además fue un gran lanzador y en el hombre de más rendía excepcionalmente tanto en el exterior como en el palo. Pero si a todo esto le añades que Chava tenía una inteligencia privilegiada para este deporte, pues eso, no he encontrado a ninguno al que pudiera comparar (invito a todo el mundo a que si alguno de vosotros sí encuentra un jugador parecido, que lo deje en los mensajes del artículo. Gracias).

– Estuviste a nada de ser el seleccionador nacional masculino antes de la llegada de Gabi Hernández. ¿Te costó aceptar no ser el elegido sabiendo que trenes así no pasan todos los días?
«Ese tema no lo comento. Sé al 100% cómo y por qué sucedió todo. Nada más que decir».

– Cuéntanos brevemente tu experiencia en China; Cuántos meses has estado ahí viviendo solo, dónde vivías, si echabas de menos la comida española, si aprendiste algo del idioma, etc.
«De mi experiencia en China te puedo decir que fue magnífica. Me gusta mucho China y su gente. Estuve 10 meses antes de ir a los JJOO. Lo más destacado fueron las muchísimas horas de entrenamiento más innumerables sesiones de vídeos o reuniones. El descanso máximo seguido fue de un día y medio, algo que fue realmente muy duro pero muy gratificante a la vez. Reconozco también que hubo algún momento, llamémoslo así, de tensión. Porobic (el seleccionador por entonces) es muy especial. Hubo tres o cuatro momentos bastante desagradables pero ahí lo dejo ya que él no tiene la ocasión de responder, así que prefiero guardarme lo vivido para mí. Con respecto al idioma teníamos un traductor chino/inglés. Entre el staff hablábamos en inglés y con alguno de ellos también en italiano. Además de que el deporte tiene un lenguaje universal y es fácil hacerte entender. Con respecto a la comida te diré que engordé unos cuantos kilos. Eso sí, tuvimos nuestros “jamón serrano” e incluso algún día hice tortilla de patatas».

– Describe únicamente con una palabra a estos entrenadores que has tenido durante tu vida como jugador: Joan Jané (Aguas de Valencia y España) – Injusticia Toni Esteller (CNB y España) – El más listo Rafa Aguilar (España) – Muy inteligente Vaguelis Roupakas (Barceloneta) – Una sorpresa muy grata Bojko Sekvig (Barceloneta) – Un buen tipo Dragan Mututinovic (España) – Irracional Miki Oca (Ondarreta Alcorcón) – Se lo pusieron muy difícil Dragan Andric (Catalunya) – No lo comprendí en su momento Jordi Signes (Aguas de Valencia) – Desconfiado Tempestini (Florencia) – Un buenazo Mariano García (Madrid) – Mi padre adoptivo

– ¿Qué ha aprendido Chava de ellos? ¿Quiénes te han marcado más positivamente?
«Lo bueno de haber tenido muchos entrenadores es que tienes una visión más amplia, más opciones, más estilos, etc. Luego eliges lo que crees que es mejor y a todo ello añades tu personalidad. De todos ellos he aprendido que hacer o que no hacer».

– ¿Qué puede ofrecer Chava a cualquier club que esté interesado en él?
«Trabajo, seriedad, mentalidad ganadora, esfuerzo, experiencia, pasión, comunicación, motivación y una dosis de realismo que siempre viene bien».

– ¿Crees en los ciclos de x años para estar en un club o consideras que mientras haya éxito no hay que romper la relación entre club y entrenador?
«¿Qué es tener éxito? ¿Ganar ligas cuando tienes el mejor equipo con diferencia? ¿Quedar segundo cuando tienes un gran equipo pero no compites con el primero? ¿Quedar el 17 de Europa? En mi opinión el éxito depende de quién te lo vende. Es relativo».

– ¿Crees que en algún momento se repetirá la edad dorada del waterpolo masculino español a nivel de selección, que tú viviste como parte activa y muy importante dentro de aquel mítico equipo? La actual lo está haciendo muy bien pero está muy lejos a nivel de logros que vuestra selección, con dos oros consecutivos en mundiales y otro oro en olimpiadas. Sin obviar que en los dos anteriores mundiales a aquellas medallas de oro, se consiguieron dos platas y otra más en la olimpiada anterior a Atlanta, cuando se consiguió el oro.
«Ojalá que sucediera. Y no solo que nos igualaran sino que nos superasen».

– Hablando de aquellos logros olímpicos toca volver a Barcelona 92 y aquella mítica plata. Pero vamos a comentar algo que seguramente la gran mayoría de los jóvenes y no tan jóvenes desconozcan. ¿Qué premio económico había por aquella plata? Y hasta qué edad no se podía hacer uso de ello? ¿Después de Barcelona se siguió compensando las medallas al igual que se hizo en Barcelona?
«Creo que te refieres al premio que dio una entidad privada, que en ese caso fue La Caixa. A los medallistas olímpicos les concedió un premio económico que variaba según la medalla conseguida. También variaba la cantidad dependiendo si era en deporte individual o colectivo. Lo que sí era absolutamente igual era cuándo recibías el premio, que era al momento de cumplir los 50 años. En nuestro caso el monto fue de 70.000 euros aproximadamente, que podías elegir entre recibirlo al cumplir los 50 años o bien recibirlo en pagas mensuales de 520 euros hasta el día de tu muerte».

– ¿Qué opinión tienes de tod@s aquell@s grandes jugador@s que han conseguido grandes cosas a nivel de selecciones para España, y quieren seguir en el mundo del waterpolo? ¿Se les debe abrir las puertas de par en par a tod@s proponiéndol@s para gestionar instalaciones deportivas, federaciones territoriales o entes federativos, o dirigir buenos equipos o estar en los staff técnicos de la española? ¿A tod@s? Te pregunto a tod@s porque de ser así, puestos está demostrado que no hay para tod@s.
«En muchos otros países eso es lo que sucede, aparte de que en países como Hungría, Montenegro, Serbia o Croacia, tienen una pensión a partir de los 35 años (vía méritos por oros en mundiales o medallas en JJOO). Éste hecho es algo impensable que suceda aquí. En mi opinión lo que no es lógico es que determinados jugadores que han escrito parte de nuestra historia, waterpolísticamente hablando, con letras de oro (que son muy pero que muy pocos) se tengan que buscar la vida. Hay que darles opciones para seguir vinculados de una u otra manera al deporte. Después Dios dirá y si hiciesen mal su trabajo pues a otra cosa».

– A colación de la respuesta anterior, si los puestos de arriba deben estar reservados para l@s grandes jugador@s, ¿a qué puestos pueden aspirar l@s que no han sido leyendas?
«Hasta ahora el 99% de los trabajos no son esos que tú llamas leyendas. Además ¿Qué es ser una leyenda? ¿Quién ganó unos JJOO? ¿Quién ganó un mundial? ¿Quién estuvo muchos años en aquella selección? No hay tantas leyendas. Dos medallas olímpicas (oro y plata) y cuatro mundiales (dos oros y dos platas) las tienen solo dos jugadores vivos. A partir de ahí tienes que descontar o medallas olímpicas u oros mundiales. Además que tres de esas “leyendas” muy, muy representativas de aquel equipo están desvinculadas totalmente del waterpolo».

– ¿Por qué no hay entrenador@s español@s entrenando en el extranjero salvo contadas ocasiones? Es más, ¿Por qué a los países con más tradición y fervor por el waterpolo, como Hungría, Serbia, Croacia o Montenegro, nunca miran a España para fichar un/a entrenador/a? Especialmente cuando el nuestro es un país tradicionalmente que saca buenos resultados a nivel internacional.
«Lo primero porque para entrenar en el extranjero no sirve el CV. Lo que más cuenta es tener amigos y eso lo dominan totalmente los entrenadores que proceden de los Balcanes. Tienen copado el mercado internacional. Se ayudan entre ellos. Lo que yo he trabajado en el extranjero no ha sido por mi CV, sino porque he sido recomendado por un amigo. Otra razón es porque se creen que los españoles no queremos trabajar en el extranjero, ya que creen que estamos encantados en España. Esto último cuanto menos».

– Viendo la realidad de este país en todos los deportes, donde la carrera deportiva es muy limitada, y la gran mayoría de deportes con una economía muy limitada y no acorde al nivel de los deportistas, ¿no sería conveniente “obligar” a l@s deportistas a formarse académicamente mientras juegan? De no hacerlo muchos buenos deportistas se quedan luego en el limbo al dejar de jugar al alto nivel, y eso a nivel emocional es muy duro.
«Yo como entrenador he recomendado siempre a los jugadores sacar adelante los estudios. Ahora no es como cuando yo empezaba. En el colegio me decían cuando les pedía un cambio de examen o comprensión en la entrega tardía de algún trabajo “Elige; estudia o haz deporte”. Ahora eso es impensable ya que tienen muchas facilidades para compaginarlo. Es por ello que creo que es muy importante que terminen los estudios».

– Vamos con la despedida. ¿No has pensado en ningún momento regresar a tu tierra natal, Santander, y aprovechando tu nombre, tu calidad, experiencia y conocimientos, y crear algo grande allí? Una escuela de waterpolo con tu nombre similar a la Academia Rafa Nadal sería algo maravilloso para nuestro deporte, y más en territorios donde el waterpolo no parece que esté avanzando como debería avanzar y a los datos me remito.
«Lo he pensado pero creo que aún tengo que hacer cosas como entrenador. La opción de una escuela en Santander siempre ha rondado en mi cabeza, aunque también hay que decir a nivel de piscinas andamos un poco cojos en Cantabria; piscinas pequeñas, poca profundidad en alguno de los lados, etc. Como te he comentado, lo tengo en mente. El tiempo lo dirá».