El reloj marcaba las 19.20 horas de la tarde de un sábado histórico para la familia del Granollers, puesto que en ese preciso instante el equipo catalán lograba el ascenso a la Liga de Primera División Masculina después de superar por 11-7 al AESE y a falta de tres jornadas para la conclusión de la competición. Tras el pitido final, tanto la repleta grada como los componentes del equipo estallaron de alegría. Como suele suceder, todos los jugadores del Granollers se tiraron al agua para celebrarlo y el técnico Pablo Quattrocchio no se libró de acabar completamente mojado, al igual que el resto de integrantes del cuerpo técnico. Tal y como es habitual en estas situaciones, muchos de los miembros del equipo se acordaron de amigos, compañeros y en general seres queridos. Uno de los recuerdos más emotivos fue el que tuvo el propio Pablo Quattrocchio para con su esposa “Gracias amor por ser mi razón, por ser todas mis razones”, rezaba la camiseta que portaba el técnico después del partido acompañada de una foto de su mujer. «Fue un homenaje a mi esposa, mi principal acreedora emocional y razón de muchas de las cosas buenas que puedo disfrutar en el presente», reconoció a WATERPOLISTA.com el técnico argentino, quien llegó a las filas de la escuadra catalana en 2009 con un año de excedencia en la temporada 2012/2013 cuando fichó una temporada por el Regatas de Santa Fe Argentina.
«LA CORONACIÓN DE UN PROYECTO»
En cuanto, al último partido en Liga del Granollers, Quattrocchio confesó tras su conclusión que «ha sido tan disputado e intenso como cabe esperar cuando se enfrenta a un equipo como el Santa Eulalia y a un entrenador de la talla de Dani Garcia. Creo que el resultado fue justo. Dentro de un gran paridad en casi todos los registros del juego fuimos levemente superiores en los duelos individuales ofensivos y defensivos sobre todo en la boya, y pudimos concretar algún gol a nuestra favor de contraataque que al adversario se le negó. En síntesis, mas allá de lo numérico el triunfo fue justo dentro de un encuentro de gran tensión e igualdad». «Para el Granollers significa colocar al primer equipo en una categoría compatible con el crecimiento evidenciado por la sección en los últimos años. Significa poder referenciar a una nutrida y muy competitiva cantera compitiendo en la categoría nacional de plata, ofreciéndole así mejores y mas altas posibilidades de competición una vez finalizada su formación. Significa la coronación de un equipo que supo aprender de los errores del año pasado y desde allí se hizo fuerte como grupo. Y significa para todos los Granolleríes waterpoleros una enorme alegría proporcional a este gran logro», añadió el entrenador llegado de Rosario (Argentina).
@etoster