Joan Jané: «Éramos como Los Angeles Lakers, casi nos tenían miedo con tan sólo llegar a la piscina»
Para muchos es el mejor entrenador de la historia del waterpolo español, y si nos ceñimos a los resultados, es el ideólogo de la mejor generación que ha dado nuestro país, con el oro de Atlanta 96 como uno de sus principales éxitos
Si decimos que Joan Jané es uno de los mejores entrenadores españoles de la historia, posiblemente no nos equivoquemos. El técnico catalán fue ideólogo y arquitecto de la mejor generación de waterpolo de nuestro país que logró los grandes éxitos como el oro en Atlanta 96 o los dos títulos más en los Campeonatos del Mundo. Ahora ya jubilado y retirado del waterpolo ve desde otra perspectiva nuestro deporte. Y es que en su trayectoria cuenta con un palmarés envidiado por mucho forjado a fuego a base de una personalidad propia que ha llevado no sólo como seleccionador masculino, ya que a lo largo de su carrera profesional también pasó por el equipo nacional femenino, o por la selección de China (estuvo del 2017 al 2020), sin olvidar su paso por el waterpolo colombiano.
– Si echaras una mirada al pasado, ¿con qué momento de tu carrera te quedarías?
«El oro olímpico en Atlanta fue el sueño más grande que le puede pasar a una persona, y más tenemos en cuenta que yo viví desde dentro los Juegos Olímpicos de México y Múnich, pero prácticamente para hacer la vuelta de inauguración y de clausura sin aspiraciones de nada con un ranking muy lejos de los mejores, pero sin embargo, con el paso del tiempo jugar contra los mejores de tu a tu y ganarlos es la cosa más bonita que me ha pasado en el mundo del deporte».
– Y si tuvieras que fijar el momento más amargo, ¿cuál sería?
«Las Olimpiadas de Sydney 2000, en la que después de un duro partido de no sé cuantas prórrogas, Rusia nos marcó el gol de oro en el último momento y nos eliminó sin la posibilidad de llegar a la final».
– ¿Qué tenía aquella generación que ganó el oro olímpico en Atlanta en 1996?
«Eran una serie de deportistas súper fantásticos, súper increíbles, cada uno en su posición era casi único y si juntas todos los mimbres era una selección que no solo se llevó el oro en esos Juegos, sino en los Mundiales de Japón y Australia. Íbamos a cualquier piscina, cualquier ciudad como si fuéramos Los Angeles Lakers; casi nos tenían miedo con solo llegar a la piscina».
– ¿Qué aportó Joan Jané a esa generación?
«Yo siempre he procurado valorar a los figuras y jugadores que son extraordinarios por su coherencia, sentido y en defensa dar un pasito hacia delante que apoyándonos con Jesús Rollán se podia conseguir».
– ¿Qué supuso aquel primer éxito para selección?
«Esta es una de las grandes tristezas y grandes decepciones, ya que considero que el éxito duró lo que dura un telediario. La fama, la proyección, la promoción y el ir a programas de televisión pasó y fue importante, pero a medida que transcurrieron entre ocho o diez días se fue diluyendo y quedó en agua de mayo».
– ¿Ha cambiado mucho el waterpolo respecto a aquellos años?
«Ha ido cambiado cada vez más en el tema físico. Cada vez más tácticamente se estudia hasta cuando se hacen las presentaciones. El tema tecnológico ha avanzado mucho y eso te permite saber cuantas veces chuta este jugador de este lado, por el otro, que tal el portero, o los penaltis. Ha cambiado bastante».
– ¿Con qué época te quedarías?
«Es muy difícil de juzgar y analizar, pero siempre digo que en aquella época éramos un poco más románticos. Yo incluso digo a veces que en ocasiones encorcetava a los jugadores, pero por suerte de de vez en cuanto había algún artista que se salta el libreto para bien del equipo».
– ¿Cómo valoras el actual momento en que se encuentra el waterpolo español?
«Yo creo que es un sueño. Si a me dicen con 15 años que dentro de unos años nuestras selecciones estarían arriba del todo, no me lo hubiera creído. Ha sido un paso adelante gigantesco con los medios, recursos y posibilidades que tenemos aquí. Ya lo decía Manel Estiarte que es un milagro lo que sea conseguido».
– ¿A qué te refieres con milagro?
«Por las pocas licencias y la poca promoción. Tu imagínate en España, ¿si no es Cataluña que regiones apuestan fuerte por nuestro deporte? A pesar de todo luchamos contra países que como Hungría promocionan el waterpolo en todo el país. En Crocia y Serbia igual o la misma Italia. Nosotros a pesar de nuestras limitaciones estamos luchando contra estas grandes potencias».
– ¿En qué aspectos debe mejorar?
«La gran dificultad es que haya regiones, ciudades o clubes que apuesten claramente por nuestro deporte. Y es que si no hay las condiciones económicas para apostar e invertir en nuestro deporte estaremos siempre en mano de los clubes catalanes, que hacen muchísimo pero necesitamos que otros se impliquen».