La graduación del VK Novi Beograd en Europa debe esperar (por ahora)

En su primera temporada compitiendo entre los mejores equipos de Europa, el VK Novi Beograd rozó con la yema de los dedos el cetro continental, sin embargo, acabó muriendo en la orilla tras una fatídica tanda de penaltis en los que paradójicamente su gran estrellas y principal referencia ofensiva, Duran Mandic erró en su lanzamiento. Sin embargo, lo cierto es que la temporada no ha sido nada fácil para un equipo que a base de talonario armó una plantilla repleta de estrellas, ya que hasta diez fueron las incorporaciones. No obstante, uno de los datos más destacables es que en menos de un año, tres han sido los entrenadores que han pasado por el banquillo serbio. El último fue una institución del país como Igor Milanovic que estuvo muy cerca de lograr una nueva Copa europea, la última la logró como entrenador del Pro Recco en el año 2015.

En este sentido, la temporada no ha sido nada fácil, puesto que mas allá de lograr el título nacional el año ha estado marcado por polémicas y problemas internos, y varios enfrentamientos entre pandilla y la junta directiva liderada por Aleksandar Šapić, que fue uno de los que más sufrió en Belgrado durante la final. Su cara tras perder la final era un poema. Con todo esto, esta derrota ante el Recco a pesar de haber sido la primera final de la historia del club, trae consigo algo de incertidumbre, ya que se desconoce si habrán cambios, incluyendo en el puesto de entrenador. Una de las novedades que está confirmada es la incorporación de Álvaro Granados, proveniente del CN Atlétuc Barceloneta. «Creo que este equipo funcionó muy bien esta temporada, mereció ganar el título europeo«, comentó tras el partido ante los italianos el técnico serbio.

@etoster