La notable de adaptación de Laura Ferrer al CN Molins le augura un determinante peso

Ésta es una temporada especial, a la par que diferente para Laura Ferrer, quien con su llegada al CN Molins de Rei se encuentra en un ambiente «totalmente nuevo» al que no está acostumbrada durante su trayectoria deportiva más reciente. Club, equipo y compañeras nuevas, sin embargo, sigo con ganas de seguir compitiendo y de disfrutar del waterpolo. A lo largo de estos años he ido formándome y aprendiendo de las mejores. Siempre me he fijado en mis referentes y he intentado aprender todo lo posible. Por supuesto los diferentes entrenadores que he tenido me han ayudado a progresar y a seguir evolucionando«, reconoce a WATERPOLISTA.com una jugadora que se caracteriza por tener miedo a lanzar y probar cosas nuevas en ataque. Más allá de esto, en la parcela defensiva es insistente, y siempre intenta ayudar todo lo posible a sus compañeras, ya que le gusta animar, motivar y transmitir energía positiva a su equipo.

En este sentido, valora como «increíble» el equipo del CN Molins, poniendo en valor el «gran compañerismo», por lo que dice estar «muy contenta de formar parte de este grupo». «Todas las jugadoras tienen grandes capacidades, tanto las veteranas del club como las nuevas. Esto juntamente con trabajo y esfuerzo puede llevarnos a conseguir grandes cosas», detalla a la vez que desvela que el objetivo principal se centra «en luchar por una de las cuatro plazas para clasificarnos al grupo de arriba». Todo ello en una competición, que aunque «no es comparable con el nivel de División de Honor, no deja de ser una competición muy dura y en la que hay mucha competitividad«, explica una jugadora que a nivel individual se marca el seguir progresando y mejorando. «Quiero seguir autoexigiéndome y nunca conformarme con un esfuerzo inferior al de mis capacidades. También tengo como reto aprender de mis errores y ver cómo se pueden mejorar», sentencia.