La Sirena CN Mataró se convirtió en el primer finalista de la vigésima edición de la Copa de la Reina después de ganar con claridad al Rubí (6-16). A las de Javi Rubio les faltaron intensidad defensiva para contrarrestar las transiciones rápidas mataroneses. Las chicas de Florín Bonca fueron a por todas en los primeros instantes imponiendo su ritmo y un demoledor parcial de 0-5 siendo letales en los dos metros y rompiendo la defensa con fugaces jugadas. El Rubí entró en escena a partir del minuto seis con un trallazo de la internacional Bea Ortiz desde los cinco metros. Este tanto ayudó a las pupilos de Javi Rubio para entrar en el partido cerrando más la defensa y encontrado el ‘feeling’ en ataque. Con todo esto, las rubinenses anotaron tres tantos que las acercaban en el electrónico (3-5). El segundo cuarto fue un verdadero monólogo para las de Florín Bonca, que rompieron a la defensa vallesana cuando y como quisieron, generando ocasiones de peligro en cada acción. En este sentido, Roser Tarragó fue la más destacada del periodo con tres dianas en su haber. Gragnolatti y Gibson completaron el recital antes de ir al descanso consiguiendo la mayor diferencia posible (3-10). En la reanudación, las cosas cambiaron mucho pudiéndose ver una auténtica guerra de defensas con mucha dureza. Por momentos, se les fue el partido a los árbitros. El único gol del tercer tiempo lo anotó Bea Ortiz de penalti (5-10). En el trámite del último cuarto, el Mataró no perdió su hambre de gol y sentenció el partido con seis goles. El Rubí, por su parte, hizo su sexto gol en una transición rápida finalizando con éxito por Bea Ortiz (5-16). Con todo esto, La Sirena disputará mañana a partir de las 13.50 horas la final ante el Sabadell que venció en la otra semifinal al Sant Andreu.
@jove_grada