Las prioridades del Epsilon Sevilla: lograr el equilibrio y apostar de lleno por la cantera

Con 237 deportistas en sus filas, el Epsilon Sevilla continúa promocionando el waterpolo en la localidad hispalense, desde que en el año 1996 un grupo de socios de un gimnasio de barrio tomaran la decisión de dar un paso al frente y crearan un club bajo un primer nombre: Waterpolo Galisport el Porvenir. «Empezó a configurarse como entidad tras la decisión de quien escribe de hacer un máster en Derecho deportivo. Formarlo fue una puesta en práctica de todos los conocimientos adquiridos, nada fácil porque no contábamos con ninguna referencia», reconoce a WATERPOLISTA.com María Jesús Díaz Serrano, secretaria deportiva de un club que en todo momento se sitúa en la realidad. «Y eso es buscar constantemente un equilibrio entre el plano deportivo y el económico. Nos mantenemos en Primera andaluza con un equipo sin grandes ambiciones que compatibiliza estudio y trabajo con entrenamiento, siendo el proyecto prioritario y para todos altamente motivante, el trabajo de las escuelas deportivas desde la categoría prebenjamin. Nuestra entidad se mantiene de las cuotas de sus deportistas, para llevar la competición a nivel estatal y asegurarnos de que podremos mantener ese estatus, la base tiene que ser muy amplia, en ello estamos», explica

En este sentido, Díaz define la evolución protagonizada por la entidad estos últimos años. «Yo diría que ensayo-error es una buena definición. Hace falta tiempo y la experiencia de años para ver evolucionar un club. La formación del personal que lo conforma está siendo crucial en esa base que se está trabajando a fondo y que aún no ha visto la luz como tal, deportivamente hablando, pero sin duda está teniendo un crecimiento muy importante y mucho más sólido. A veces, para evolucionar hay que invertir en aspectos que a priori no se ven», comenta a la par que considera que el waterpolo andaluz ha crecido «mucho». «Los clubes hacen un gran esfuerzo para hacer visible este deporte, esperamos que ello sirva para que las instituciones ayuden a su crecimiento. Si nos remontamos a ligas de hace 5-7 años y las comparamos con hoy, el número de equipos ha dado la vuelta. En Andalucía está dejando de ser un deporte desconocido. Sevilla, Málaga, y sobre todo Cádiz cuentan con muchos equipos. Cierto es que aún hay regiones, Almería, Córdoba y Huelva, en las que no se practica al menos a nivel competitivo», asegura, al igual que considera clave más espacio en piscinas. «Da siempre la sensación de que el waterpolo no es bienvenido en las instalaciones deportivas. Carecemos de espacio para los entrenamientos y tenemos siempre problemas para conseguirlo en la celebración de competiciones. Junta de Andalucía y Ayuntamiento podrían dar muchas más soluciones a esto», concluye.

@etoster