Victor Sánchez: «Ha sido todo un privilegio participar en el gran crecimiento de estas jugadoras»

Las últimas cuatro temporadas, la sección femenina del CN Ciudad de Alcorcón ha tenido nombre propio: Víctor Sánchez, quien ha sido el encargado de liderar un ambicioso proyecto que desde un inicio partió con la idea de evolucionar y crecer. Sin embargo, ahora el responsable será otro debido a que el técnico madrileño ha tomado la decisión de dar un paso a un lado. «Los motivos de mi no continuación son estrictamente laborales (la mayoría de entrenadores en Madrid compaginamos trabajo, con la actividad de waterpolo) y, sobre todo personales, ya que mi familia necesita más de mí y si todo va bien, se verá ampliada a finales de este año. Es el momento de parar un poco después de 36 años seguidos sin interrupción, respirar, reflexionar, disfrutar, y coger fuerzas, es lo que necesito ahora», reconoce a WATERPOLISTA.com Sánchez quien se muestra satisfecho del rumbo que ha tomado el equipo.

«La valoración que hago de mi etapa en el equipo es, que muy por encima de lo deportivo, se ha conseguido hacer un grupo fantástico de trabajo, con chicas que se respetan entre ellas, se ayudan, se apoyan, se cuidan, preocupan, y son un 11 sobre 10 en lo personal. Estrictamente en lo deportivo, hemos disfrutado mucho, pero no es mérito mío, es de ellas que son las que lo han trabajado y sufrido más», explica el entrenador, quien por otro lado entiende que «lo mejor, en lo deportivo ha sido, tener la oportunidad de empezar con un grupo de chicas mezcla 20% de infantiles, 70% cadetes, y 10 % juveniles, e ir con ellas de la mano hasta la Primera División, y conseguir su primera medalla en un Campeonato de España. En lo personal, sin duda, el privilegio de participar en el crecimiento y evolución de todas ellas. Y entre todas, haber conseguido crear recuerdos imborrables«, comenta a la par que desvela que lo peor de todo es «tener que alejarse del waterpolo y de las piscinas».

| La evolución del equipo

Por otro lado, Sánchez hace una radiografía de la evolución que ha tomado el equipo: «se han superado todos los objetivos que se han marcamos cada grupo de trabajo, cada año, respecto al anterior, y a pesar de no pocas dificultades en el camino, la evolución de estas chicas no ha terminado, ha de continuar. La única espinita que tengo de no poder cumplir con el equipo es, no dejarlas como mínimo en División de Honor, pero sé que más tarde o más temprano sucederá. Tienen calidad, compromiso, esfuerzo, trabajo, y ahora algo más de experiencia, (a pesar de ser un equipo muy joven) por lo que si acompañan las condiciones, y respetan lesiones, se va a hacer, no me cabe duda. Prueba de ello, es el mareo anual permanente de querer contar otros equipos con jugadoras que se van formando aquí. Es un alago, pero también es molesto sobre todo a edades tempranas«, relata un entrenador que no conoce ahora que retos profesionales se podrá marcar, ya que sólo tiene una idea en la cabeza. «Siempre estoy abierto a lo que me de la vida, de momento centrarme en mi profesión, en mi familia y devolver todo el tiempo que que no he podido darlas hasta el momento. Más adelante, ojalá se den las circunstancias para que pueda volver, quién sabe, ya que el waterpolo siempre de un modo de otro ha impedido que lo deje del todo, o por una circunstancia u otra. Por el momento, seguiré el waterpolo como un aficionado más, quién sabe mañana«, sentencia.

@etoster