Enrique Nuño: un ‘prometedor’ camino en el que sustentar su proyección

Con toda una vida (deportiva) por delante, Enrique Nuño mantiene en alza un crecimiento sostenido desde la cuna del aprendizaje y bajo una etapa que califica como emocionante. «Estos últimos años he crecido progresivamente, he tenido la suerte de contar con muchos entrenadores increíbles y experiencias que me han enseñado lecciones de un valor incalculable«, reconoce a WATERPOLISTA.com un deportista madrileño afincado en el Real Canoe NC con quien está adquiriendo experiencia en Nacional. En esta Liga ya ha tenido tiempo para demostrar que es un jugador constante, perseverante y con muchas ganas de luchar sin importar el rival, y con el orgullo de formar parte de una familia, que «aún teniendo medios ilimitados nos apoyamos y luchamos con tesón por siempre mejorar un día más como grupo«.

En este sentido, Nuño valora mucho la actitud ambiciosa del proyecto para este año, considerando que «apuntar alto es el camino para luchar por tus objetivos», que en este caso son ambiciosos, a pesar de plantear una dinámica de ir partido a partido, poniendo como reto principal el inspirarse de cara a cada semana. «La División de Honor es una liga increíblemente competitiva con equipos de enorme nivel que tienen gran desempeño en Europa, la veo como una de las mejores ligas del mundo con un nivel tanto técnico como físico realmente exigente», explica el madrileño, el cual desvela que su reto principal «en un deporte de equipo como es el waterpolo es aportar a la dinámica colectiva». «Honestamente creo que todos los jugadores soñamos con formar parte de la selección pero opino que estos grandes retos son consecuencia de pequeños objetivos sumados a esfuerzo individual y trabajo en equipo«, concluye.