Los retos a los que se enfrenta el waterpolo en Sudamérica
Hablamos en WATERPOLISTA.com con Gilberto Cáceres, Director Técnico del waterpolo venezolano con la intención de conocer la situación del waterpolo en su país y en el resto de Sudamérica
El waterpolo venezolano, al igual que en el resto de países sudamericanos, plantea una clara estructuración bajo un ambicioso proyecto. «Debemos hacer un análisis de todas las ligas o sistemas de trabajo de equipo que se han manejado en la área sudamericana», reconoce a WATERPOLISTA.com el Director Técnico de Venezuela, Gilberto Cáceres quien considera que es «importante saber cuáles son las tendencias en el mundo del deporte y lo que queremos llevar en sudamerica. Hablamos de marketing, inovacción, la parte del profesionalismo que lo que necesitamos. Lo más importante son los recursos para poder manejar todo el proyecto», explica a la par que entiende que están trabajando en generar y potenciar «nuestra identidad corporativa» para determinar «cual es el contenido de los proyectos a nivel comunicacional». «Establecer el sistema de competición, siendo un calendario único para todos y que podamos fortalecer cada uno de los países y dotarles de las herramientas. Concertar de una vez por todas el marketing comunicacional. Los patriocionios con quien contamos. Consolidar nuestra pagina web, logo, redes sociales y trabjar conjuntamente información de cada uno de los proyectos«, apunta un profesional que entiende que para ello es importante establecer el sistema de gobierno, para que así todos se pongan de acuerdo a la hora de potenciar y promocionar el mundo del balón amarillo con lo que les permita generar un modelo con el que gestionar los clubes deportivos en todos los ámbitos, desde la iniciación al waterpolo, hasta el ámbito jurídico de Federaciones y clubes.
Para alcanzar tal fin y con la idea de que el waterpolo sudamericano de un paso al frente, se ha establecido dentro de la Confederación Sudamericana una serie de proyectos con la intención de unificar información relativa a competiciones, calendarios, marketing, comunicación y demás elementos que ayuden a hacer crecer el deporte en esos países. Este proyecto en común que lidera entre otros el propio Gilberto Cáceres data de hace más de 20 años, cuando este profesional asentado desde hace unos años en Barcelona, coincidió en el Mundial de Estambul con Rafa Aguilar y Joan Colomer. En base a este primer contacto se comenzó a establecer un modelo similar al español, con la ayuda del presidente del Comité Olímpico Venezolano, Eduardo Álvarez. Y es que a pesar de la situación económica, Venezuela es uno de los países sudamericanos que se ha desarrollado más. «El equipo masculino estuvo presente en cuatro panamericanos y el femenino se clasificó para cinco ediciones», comenta Cáceres quien en este sentido llegó a la ciudad condal con la intención de que pudiera perfeccionar la estructura y generar una línea de conexiones con las que potenciar iniciativas que ayuden a profesional el waterpolo allí. Es más, gracias a estos contactos se han puesto en marcha formaciones varias, como la que impartió Beto Fernández.
Y es que con todo estos mimbres, el objetivo es claro, siempre y cuando la pandemia lo permite ya que como en otros deportes, al waterpolo le ha pillado con el pie cambiado. «Lo más importante ahora es planificar y ponernos de acuerdo todos en buscar la manera de aprovechar este tiempo para ir haciendo el programa o el proyecto que consiste en fortalecer la estructura de los clubes, y que los comités olímpicos se encarguen de la parte del olimpismo, inscripciones y todo el apoyo en diferentes estructuras como es la formación y todos los programas. Que las confederaciones trabajen todo lo que sea la discusión de los eventos, montar los calendarios, los cursos… que las federaciones deportivas se encarguen de todo lo que sea sus calendarios, campeonatos nacionales y manejar todos los programas de las diferentes disciplinas actuáticas», explica Cáceres, el cual considera importante que «los clubes trabajen la estructura deportiva porque son entidades que tienen la función más importante». «El desarrollo de la iniciación, es decir hasta los diez años lo que entedemos por alevines en España y pasar al perfeccionamiento tecnificación que a viene a partir de la categoría infantil es clave«, puntualiza un profesionalizar que junto al resto de compañeros trabaja en implementar dentro del proyecto la tecnología para entre otras cosas sacar un reglamento digital que ayude a la promoción para así crear y unificar el mismo criterio.
Todo estas iniciativas con las que potenciar los proyectos parten con la idea de recordar la idiosincracia del waterpolo en Sudamerica. «El primer campeonato sudamericano se realizó en el año 1925. En el 1928 tuvimos participación en los JJOO hasta el 1984. Después de estos 20 años el waterpolo ha habido eventos importantes como los Juegos Olímpicos de Río en 2016. Los Panamericanos de Lima y ahora los que se van a realizar en Chile. Estos dos países cuentan con instalaciones de primer nivel y otra cosa importante cuando eres sede automáticamente quedas clasificado para las Olimpiadas. A nivel de campeonatos sudamericanos con 8-10 equipos, lamentablemente Venezuela no ha podido participar en los dos ultimos debido a la situación económica. Una de las cosas importantes que es el desarrollo del sudamericano de clubes, puesto que este año se iba a realizar la quinta edición en masculino y femenino la primera. Toda esto ha sido trabajo de las federaciones y los comités olímpicos de cada uno de los implicados. A nivel de organización la Confederación Sudamericana ha conseguido cursos para algunos países, por medio de la FINA, para el desarrollo y la formación. En cuanto resultados sudamericanos nos damos cuenta en estos últimos 20 años. Brasil estuvo en siete, Argentina en uno, la mejor posición fue para Brasil que acabo décimo. En femenino 10 mundiales: 9 Brasil y 2 Venezuela«, explica Cáceres.