Para el CE Picornell cada campaña es un nuevo reto

Junto a Óscar Tarriño, su principal responsable técnico, conocemos en WATERPOLISTA.com el actual proyecto, así como la hoja de ruta que se marca esta entidad catalana

En el año 2000, Óscar Tarriño aterrizó en el CE Picornell, una vez que su anterior club, el CN Santa Coloma desapareciera. «Fuimos algunos de este club a Picornell ya que estaban buscando jugadores y nosotros un club donde jugar. La verdad es que fuimos muy bien acogidos desde el primer día. Esta ha sido siempre una característica de nuestro club que somos una gran familia donde nos gusta sumar a todos los amantes del waterpolo«, reconoce a WATERPOLISTA.com el ahora responsable técnico de la sección de waterpolo del club, quien desvela que «hace unos años hubo un relevo generacional donde los más jóvenes cogieron más responsabilidad dentro del club, no sólo para jugar, que ya lo hacían, sino dentro de la estructura organizativa del club y con más responsabilidad». «Creo que fue un gran acierto ya que esto nos permitió asegurar la continuidad del club, seguir creciendo con aires renovados y con los jóvenes aportando en todo momento su granito de arena y sus ganas de mantener y mejorar el nivel competitivo del equipo. Así que podemos considerar que estos últimos años hemos consolidado el grupo y hemos conseguido atraer nuevos jugadores (cosa que no es nada fácil) lo que nos permite seguir compitiendo a un buen nivel», explica.

En este sentido, el club actualmente tan sólo cuenta con un equipo en categoría absoluta, ya que no disponen de categorías. Actualmente cuentan con una plantilla de unos 20 jugadores con licencia pero también cuentan con jugadores que vienen al club porque «tienen ganas de aprender a jugar a waterpolo y nosotros encantados de poder enseñarles todo lo que podamos«. «Estos son sólo los jugadores en activo, pero somos mucho más que formamos parte de esta gran familia que no deja de crecer. Ya que estés o no actualmente en el club seguimos en contacto, viéndonos en partidos, torneos o salidas», asegura Tarriño quien entiende que para ellos cada temporada es un reto. «Somos un club totalmente amateur que juega en el espacio que nos cede amablemente las Piscines Bernat Picornell y al no disponer de categorías dependemos de los jugadores que vengan de otros clubes a jugar con nosotros. Así que al finalizar cada temporada ya estamos pensando en cuántos jugadores nuevos necesitaremos. Nuestro reto a corto plazo es mantener la estructura organizativa y ser un club cada vez más atractivo donde venir a jugar. Bien es cierto que estos últimos años lo estamos consiguiendo, al ser un club que te permite seguir jugando a un buen nivel y poder compaginar estudios y trabajo», comenta a la par que desvela que a largo plazo, «soñando un poco«, nos gustaría «disponer de categorías, empezar desde los más pequeños que fueran creciendo y pasando por todas las categorías del club hasta pasar a formar parte del club», puntualiza un técnico que considera que el waterpolo en Cataluña goza de «buena salud en cuanto al nivel de jugadores que salen de su cantera nutriendo la selección y ganando títulos a nivel de club y de selección«, aunque a su vez entiende que «otra cosa es la vertiente económica, donde los clubes pasan serías dificultades para poder mantener las estructuras, hacer equipos competitivos y hacer el waterpolo más profesional«.» Nosotros no escapamos de esta tendencia, bien es cierto que con las aportaciones que hacemos todos los jugadores nos permite poder competir sin problemas pero es un techo si quieres crecer», sentencia.

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