Afanados a los goles de un letal Arnau Abel

Trece años dan para mucho. Y más si te los pasas sumergido en un mar de emociones entorno a una pasión que te atrapa a primera vista. Arnau Abel es un claro ejemplo de amor por un deporte que le ayuda a desahogarse al final del día. Después de una larga jornada necesitas desconectar, desahogarte y pensar en otras cosas. Es por ello que cada vez que pisa El Complex -donde entrena con sus compañeros de CN Sant Feliu- se disipan preocupaciones, malos rollos y sólo viene a la mente entrenar, esforzarse y luchar por ganarse cada fin de semana un hueco entre los trece de Ferrán Plana.

Y es que el waterpolo es esto: «compañerismo, amistad, risas y mucha diversión«, eso sí, «menos cuando toca nadar series de 400«, puntualiza entre risas el actual máximo goleador -doce dianas en su haber- de un CNSF que ocupa tras la cuarta jornada la cuarta plaza de la Liga de Primera División Masculina con ocho puntos. El pasado sábado no lograron pasar del empate en su vista al recién ascendido CN Montjuic en un derbi por todo lo alto en el que la intensidad impuesta por ambos planteles fueron la nota característica.

Un grupo unido

«Estamos muy bien colectivamente; hay buen rollo y muy buena relación entre todo», reconoce el jugador

El conjunto catalán afronta con ilusión esta temporada en la categoría de plata con la intensión de consolidarse y poner la mirada en ambiciosos objetivos, puesto que al final del camino se asoma «con mucha cautela» la posibilidad de regresar a División de Honor. Sin embargo, todavía es pronto y desde el Sant Feliu llaman a la prudencia sabiendo de la dificultad que entraña una competición en la que cada jornada las sorpresas aparecen sin avisar. Teniendo todos estos condicionantes, Abel reconoce que «estamos jugando bastante bien colectivamente a pesar de que se han incorporado cinco jugadores nuevos esta temporada. Hay muy buen rollo y muy buena relación entre todos, hecho que también ayuda a que salgan mejor las cosas dentro del agua«.

«He comenzado la Liga muy metido y acompañado de buena racha», confiesa Arnau Abel

Entre todo esto, su papel parece que puede volver a ser determinante una temporada más. El anterior curso fue con diferencia el más acertado en la parcela ofensiva con la friolera suma de 51 goles. Este año va camino de sobrepasar este registro. Un hecho que no parece preocuparle, puesto que antetodo Arnau es un jugador de equipo y premia la actuación colectiva por encima de todas las cosas: «Obviamente, marcar gol es la esencia del waterpolo y te motiva mucho cuando marcas alguno, a mi y a todo el mundo. He empezado la liga muy metido y acompañado de una buena racha, pero está claro que hay y habrá partidos de todo. Mi función en el equipo es ayudar tanto como pueda en el aspecto ofensivo, sobretodo. Pero es gracias a la faena de todo el equipo que se logra marcar gol«, explica a la vez que desvela su reto más personal: «crecer como deportista pero seguir disfrutando muchos años más«.

@etoster
REPORTAJE GRÁFCO: FERRAN PAGES