La XXII edición de la Copa de la Reina ha tenido varios temas a destacar. En primer lugar la ratificación de los pronósticos con el título para el Astralpool CN Sabadell, que suma su catorceava Copa. En segundo lugar el reconocimiento de una organización ‘diez’ para el CE Mediterrani, que ha mimado hasta el último detalle, logrando que deportistas, técnicos, árbitros, directivos y público gozasen del espectáculo sintiéndose en un gran marco y con la sensación de estar en casa. Enhorabuena. Tercero la respuesta del público. Casi medio centenar de personas han hecho pequeña la piscina Josep Vallés, vestida para las grandes ocasiones.
Grandes detalles
Cuarto, los detalles: los partidos en streaming, la pantalla en el palco que permitía visualizar las repeticiones de las mejores jugadas, las pruebas del nuevo programa de waterpolo que substituirá próximamente al actual, con el que se conseguirá seguir al momento los partidos, disponer de estadísticas y una mayor agilidad en todos los aspectos. Quinto, más mujeres que nunca en los arbitrajes, el progreso del waterpolo femenino debe ir acompañado de una mayor cantidad de árbitros y apoyarlas para su progreso. Sexto, las jugadoras y técnicos, un verdadero lujo disfrutar de la entrega e ilusión de cada uno de los protagonistas. No importaba el resultado, los márgenes amplios no hacían bajar los brazos a ninguno de los protagonistas y ello se agradece como aficionado al waterpolo. Mi más sincero aplauso. Más allá de todo ello, mi felicitación a la MVP de la competición, Bea Ortiz, jugadora, que siendo ya una realidad tiene un futuro grandioso, parece tocada por una vareta mágica que le permite hacer fácil cualquier cosa.
En referencia a la competición lo más importante es que nadie ha defraudado. Es bien cierto que el primer partido dejó tocadas moralmente a La Sirena CN Mataró, pero pese a no tener su mejor día y tener que ir a remolque de un acertado CN Sant Andreu, lucharon hasta el final y ello las hace merecedoras del mayor aplauso. Más duro lo fue para el anfitrión, el CE Mediterrani, que por la banda buena del cuadro, se situó con dos goles de ventaja en el tramo decisivo del partido y vio como el CN Terrassa le daba la vuelta y las dejaba sin final. A pesar de la tristeza, con el tiempo verán que esta experiencia es impagable y que han estado muy cerca de conseguir un sueño.
Dignas actuaciones
Y entraríamos en los vencedores. El CN Sabadell merecerá un comentario más extenso posteriormente, pero, debe felicitarse a un equipo que lucha contra la presión de saberse favorito y que no se cansa de ganar. El CN Terrassa de Xavi Pérez, aprovecha siempre las ocasiones, luchador, con el espíritu de su técnico, con una plantilla humilde, ha firmado su segunda final de Copa. Para sacarse el sombrero. El CN Sant Andreu, un equipo joven en clara progresión. Superó a La Sirena de manera clara y puso en un brete al CN Sabadell en lo que era la final avanzada. La posibilidad de la sorpresa estuvo muy presente. Para el CN Rubí, el éxito era estar en la Copa y su valentía al afrontar el partido contra las campeonas continentales, les llevó a marcar hasta seis goles. Pese a la diferencia en el marcador pueden salir satisfechas de su presencia. La Escuela de Waterpolo de Zaragoza, puso las cosas muy difíciles al finalista, se avanzaron hasta 6-3, resultado al que el CN Terrassa dio la vuelta, no sin esfuerzo. Su calidad quedó patente, a la vez que notaron lo poco habituadas que están a jugar y entrenar en piscinas de máximas dimensiones.
[bs-quote quote=»Los partidos en streaming, la pantalla en el palco que permitía visualizar las repeticiones de las mejores jugadas, las pruebas del nuevo programa de waterpolo fueron buenos detalles» style=»style-16″ align=»center»][/bs-quote]Y como he comentado anteriormente vamos a analizar un poco más profundamente el dominio del CN Sabadell, un dominio que no es gratuito, ni fácil. Es bien cierto que disponen de la mejor plantilla, pero ello va acompañado por un gran esfuerzo económico por parte del club para mantener en sus filas a jugadoras de calidad contrastada que podrían jugar en los mejores clubs del mundo. Su gran secreto, no es solo el dinero, sino que lo es la ambición y las condiciones de entrenamiento. Ello hace que las mejores jugadoras aspiren a estar en este equipo. Con una base de jugadoras salidas de casa, más del CE Mediterrani, con incorporaciones puntuales pero claves, como Pili Peña o en las jóvenes Paula Leitón o Bea Ortiz, mantienen un equipo equilibrado de presente y futuro que les asegura poder luchar por todo durante muchas temporadas, a la vez que ser modelo para las jugadoras de su base y la de todos los clubs.
Pero disponer de esta plantilla, significa una gran presión, es una plantilla con un objetivo, ganar la máxima competición continental, no ganar la Champions se considera un fracaso y los títulos estatales son una obligación y cuesta jugar de esta manera. El reto para ellas y su equipo técnico es mantener el nivel de entrenamientos y competitivo semana a semana, sabiendo que la mayoría de partidos son auténticos paseos para ellas y solo se trata de saber cuántos goles marcaran. Y esto es realmente complicado. Conseguirlo y durante tantos años consecutivos es muy meritorio.
[bs-quote quote=»Con una base de jugadoras salidas de casa, más del CE Mediterrani, con incorporaciones puntuales pero claves, como Pili Peña o en las jóvenes Paula Leitón o Bea Ortiz, mantienen un equipo equilibrado de presente y futuro» style=»style-16″ align=»center»][/bs-quote]A la vez un gran número de ellas son piezas básicas de nuestra selección nacional, lo que hace que sus periodos de recuperación sean mínimos. Encontrar el equilibrio es difícil y es una realidad gracias a la cooperación entre técnicos del club y selección nacional. Todo ello más su popularidad , con presencia en los medios de comunicación y sociales, hace preciso que deban mantener bien puesta la cabeza sobre los hombros , puesto que toda esta gloria, si creen que es gratuita, se esfuma en nada y cuesta mucho volver a disponer de este estatus. Todo ello significa un autentico reto, que los toques de atención que han significado o significan las victorias del CE Mediterrani, en su última liga, la Sirena CN Mataró o el Ondarreta Alcorcón en la Copa, o la progresión del CN Sant Andreu, hacen que sepan que no pueden dormirse en los laureles.
@GasparVenturaM