Los actuales retos del waterpolo vasco: más de 1.300 licencias

En la actualidad, el waterpolo vasco supera las 1000 licencias. Y si tenemos en cuenta las fichas de los deportistas escolares, las cifras pueden sumar 300 más. Todo ello dentro de un sistema de competición en el que todas las categorías están funcionando a «pleno rendimiento». «Ha habido algún aplazamiento por casos positivos en algún equipo, pero por ahora podemos decir que esperamos poder llevar adelante todas las ligas. Hemos dividido las categorías en grupos para disminuir el número de partidos y de esta manera poder dejar ventanas en las que disputar esos partidos aplazados», reconoce a WATERPOLISTA.com el responsable de la Federación vasca, Rubén De Castro, quien considera que se han logrado estabilizar en número de equipos y de deportistas. «Hemos perdido algún equipo femenino, una mala noticia, en estas temporadas de pandemia. No perder muchos/as deportistas, ni equipos era una gran preocupación que teníamos y al ver como estamos nos hemos llevado una gran alegría. Sin duda, el gran trabajo de los clubes a logrado contrarrestar las dificultades de la pandemia», puntualiza.

| Los equipos en Nacional

En este sentido, De Castro explica que «tener equipos en ligas nacionales ayuda mucho a subir el nivel general de nuestro territorio. Estos equipos deben ser un referente para todos nuestros y nuestras deportistas, y un objetivo a donde llegar. Aún así, estamos un poco preocupados porque no percibimos mucha ambición por parte de muchos clubes de llegar a esa categoría. Sabemos de la dificultad que hay en nuestro territorio porque las ayudas institucionales son escasísimas, quizás hay más pegas que ayudas, pero no debemos de perder la ambición», relata, así como desvela la hoja de ruta que se marcan a corto – medio plazo: «desde la federación trabajamos para que todos los deportistas y clubes puedan tener competición para ayudar a motivar a sus deportistas. Por otra parte, tenemos planes de tecnificación para nuestros y nuestras deportistas de categoría infantil para hacer un gran papel en los campeonatos de España por comunidades, y que éstos y éstas lleven sus aprendizajes y experiencias a sus clubes y ayuden a sus compañeros y compañeras a motivarse y subir el nivel waterpolistico. A su vez, tenemos los grupos de tecnificación de gipuzkoa-alava y de Bizkaia en los que trabajamos, con nuestro responsable de tecnificación, para ayudar a esos y esas deportistas que podrían llegar a convocatorias de equipos nacionales a conseguirlo. Y ya ha dado sus resultados en anteriores temporadas», apunta.

Por otro lado, en cuanto a los retos que se plantean a largo plazo, De Castro reconoce que piensan en «poder mejorar las condiciones de esos grupos de tecnificación para dar cabida a más gente y aumentar su trabajo; y de esta manera, ayudar a nuestros clubes a ver qué podemos estar en las ligas nacionales y que aumenten su ambición hasta llegar a tener equipos incluso en División de Honor«, puntualiza, a la par que habla sobre el papel del waterpolo vasco con respecto a la situación a título Nacional: «creo que por número de equipos y deportistas, y el nivel demostrado durante las últimas temporadas en los campeonatos de España por comunidades, podemos decir que estamos tras las dos grandes comunidades waterpolisticas por excelencia (Madrid y sobre todo Cataluña), y quizás Andalucía que gracias al bien trabajo de tecnificación que están realizando. Esperamos poder llegar a decir que estos buenos resultados en edades tempranas hacen subir más nuestro nivel general en absolutos y aumentar la presencia en las ligas nacionales«, sentencia.

@etoster