Sobresaliente: la nota para el waterpolo español

Como no podía faltar, nuestro columnista de cabecera hace su particular balance de un año poniendo en valor el trabajo que todos los integrantes del waterpolo español han llevado a cabo a lo largo de los 365 días

Evidentemente siempre se puede superar, es el motivo del deporte de competición, siempre queremos más, llegar más lejos, más rápido, ser lo mejores, pero, al terminar este año 2021 cuando hablamos de nuestro waterpolo, sin ser matricula de honor, podemos ponerle un SOBRESALIENTE en mayúsculas. El mayor test son los Juegos Olímpicos y en Tokio, tanto hombres como mujeres rallaron una gran altura. Los chicos de David Martín fueron los mejores hasta llegar a una semifinal en la que les faltó el acierto necesario para superar a la que sería campeona olímpica, Serbia. Un partido hecho a lo que convenía más a nuestros rivales, con numerosas jugadas de superioridad por cada costado, obligo a dejar el juego rápido, vistoso de nuestro combinado nacional para luchar de tu a tu sin la suerte necesaria. El bronce se escapó ante Hungría, menos afectada por la eliminación en la jornada anterior. Así y todo, no fue un paso atrás en la ratificación de dos pódiums en las últimas competiciones internacionales. Podemos afirmar sin medo a errar que estamos consolidados en el grupo de favoritos para ganar cualquier competición. Por su parte, las mujeres, desde hace más de una década, se han mostrado como un seguro de medalla en todas las grandes competiciones y los Juegos de Tokio no fueron una excepción. Una competición redonda, con un traspiés preliminar y una gran semifinal, lo que les permitió llegar a la final soñada. Estados Unidos nos puso en nuestro sitio, un lugar que todas las selecciones querrían, subcampeonas olímpicas, que no es poco, pero que, a nuestro siete, al equipo de Miki Oca, que tantas tardes de gloria nos está dando, es un reto a superar. De momento queda aparcado, pero, en la mente de esta selección ganadora donde las haya.

| Un futuro muy asegurado

A nivel de categorías el Campeonato Mundial Junior Femenino, venciendo con autoridad a toda una potencia en los grupos de edad como es Grecia por un contundente 10-5, habla de un relevo impresionante para cuando lo necesite la generación de oro. El traspiés de las juveniles en Croacia no quita ni un ápice en el valor futuro de las componentes. En masculino, los juveniles, en el Europeo de Malta, vieron cómo se les escapaba el pódium en los penaltis ante Hungría, mientras que el Mundial Junior de Praga nos dejó en un sexto lugar alejado de nuestras aspiraciones. Los más jóvenes, los juveniles, llegaron a la final en su Europeo, en Loule (Portugal), solo Hungría, otra ves los magiares, nos dejaron con la miel en los labios, pero se llevaron para casa una plata de indudable mérito. Y a su vez cabe resaltar el reconocimiento a nivel internacional a nuestro waterpolo con las designaciones de los mejores en cada competición, desde Dani López-Pinedo en absoluto, a los jóvenes con Unai Aguirre y Elena Ruiz como lideres de unas generaciones que nos van a llevar a superar los logros obtenidos hasta hoy.

A nivel de la competición doméstica, CN Atlètic Barceloneta y CN Sabadell mostraron su superioridad, en hombres y mujeres respectivamente, no sin que, los marineros, perdieran la competición inicial de la temporada, la Supercopa de España, cuando en las semifinales el club organizador, el CN Sabadell les eliminara. En la final, los vallesanos se llevaron el titulo en una final inesperada y de mala suerte para el perdedor, cuando un lanzamiento forzado, fácil de detener, fue desviado por un defensa, entrando en la portería cenebista en el último segundo. En mujeres, las de David Palma quisieron recuperar un cetro que puso en duda el CN Mataró la temporada anterior y lo hicieron con autoridad, pero reconociendo la categoría del rival. A nivel internacional, nuestros equipos rallaron un buen nivel, pero, no conseguir el objetivo de quedar campeones, no permite proclamar como exitosa su temporada a este nivel. Así y todo, considerar que no es una buena temporada si no llega el título, habla por si solo de las aspiraciones y categoría de nuestros clubes. Terminar este resumen sin dedicar un apartado al adiós de Chus Martín sería muy injusto. Sorprendentemente, el técnico que dirigió al CN Atlètic Barceloneta a la cima del waterpolo continental, que ha sumado un sinfín de títulos a nivel nacional, decidió dejar el timón de su club de toda la vida. Su humildad en el trabajo, en el trato con todo el mundo del waterpolo, le ha llevado a un reconocimiento sordo, cuando lo que merece es el mayor de los aplausos de todos los que hemos compartido su trabajo a la largo de su carrera que por cierto, seguro va seguir exitosa donde vaya a aportar su saber y profesionalidad.

twitter-bird@GasparVenturaM

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