Teo Soler: un rubinense adoptado que se bañó en bronce con Argentina
Este jugador con un alto sentimiento de pertenencia al CN Rubí ha presentado ya sus credenciales como jugador no sólo en la Liga de División de Honor, sino también en el plano internacional con la medalla de bronce que ha logrado con la selección argentina en los pasados Juegos Panamericanos
La llegada de Teo Soler al CN Rubí fue para él un punto de inflexión con el que asentar las bases de su evolución como waterpolista. Es por ello que no es extraño ver cómo hoy día vive una etapa satisfactoria. «Tengo la suerte de poder decir que juego con gente que considero mi segunda familia en Rubí, además de representar a la selección argentina, que es algo que me hace sentir lleno de orgullo y satisfacción cada vez que juego con ellos. Creo que me encuentro en un punto muy bueno de mi trayectoria, ya que me siento muy cómodo y disfruto de jugar a waterpolo, y eso es sin duda a la confianza que me han dado todos estos años mis compañeros y entrenadores en Rubí», explica a WATERPOLISTA.com un jugador polivalente que disfruta (y mucho) cuando se tiene que foguear en la posición de boya, o bien hacer «el trabajo sucio» en la parcela defensiva. Bajo estas premisas, Soler no sólo ha demostrado enteros en el equipo rubinense, sino también en la selección argentina con quien se colgó el bronce en los pasados Juegos Panamericanos. «Lograr este bronce ha sido un logro impresionante fruto de muchos años de trabajo de muchísima gente. Esta medalla panamericana era el objetivo de hace ya prácticamente veinte años para el waterpolo argentino, y haber podido formar parte de este logro es algo que me llena de orgullo. En definitiva, este bronce nos motiva como país a ver el futuro con ilusión y a ir a por logros aún mayores«, puntualiza.
Ahora, una vez ha pasado la resaca internacional, el que fuera jugador también del CN Granollers se ha puesto de nuevo en clave doméstica, y en particular desde su aventura en el CN Rubí. «Considero a toda la gente del club como una segunda familia para mi. A nivel de recursos somos conscientes que estamos un peldaño por debajo de otros clubes, pero siempre se ha compensado con la calidad humana que hay en el club. Por eso es tan especial este club, y no tengo más que palabras de agradecimiento«, comenta, al igual que plantea las claves del actual proyecto. «Este año mantenemos el bloque de los anteriores años, con jugadores que venimos jugando ya muchos años juntos y añadiendo un par de caras nuevas como Sergio y Diogo, que sin duda nos están ayudando muchísimo a subir el nivel. Por eso valoro muy positivamente el proyecto, porque somos un grupo que venimos jugando mucho tiempo juntos y cada vez buscamos obtener mejores resultados que el año anterior«, añade.
En todo caso, el Rubí ha dado buenas muestras de su hambre por asentarse en la Liga que según reconoce «se ha igualado mucho exceptuando a los tres o cuatro clásicos que están siempre arriba en la tabla«. «Por eso creo que estamos delante de una de las ligas más divertidas de los últimos años, ya que más que nunca hay muchos partidos en los que puede pasar cualquier cosa. Eso como jugador te motiva mucho más, ya que casi todas las semanas nos vemos delante de rivales contra los que hay partidos reñidos y competitivos«, asegura, al igual que desvela que uno de sus retos pasa por compartir equipo y vestuario con su hermano pequeño que está entrando ya en dinámica del primer equipo.