Iván Pérez: «Exceptuando cuatro o cincos, trabajar de entrenador de waterpolo es supervivencia pura y dura»

El considero como el mejor boya de la historia del waterpolo es el protagonista de una nueva edición de 'Charla con Passion' en la que habla con franqueza (tal y como nos tiene acostumbrados) y nos muestra su lado más personal

– ¿ A día de hoy dónde se encuentra el gran Iván Pérez? ¿Estás entrenando en algún sitio?
«Después de sumar otra experiencia más en el extranjero, estoy de vuelta en Barcelona y de momento no estoy entrenando en ningún sitio».

– ¿Hay algún proyecto en mente para coger algún equipo en breve?
«Proyecto de waterpolo no por el momento pero sí que es verdad que estoy metido en otro tipo de proyectos».

– Es posible que mucha gente no lo sepa pero la temporada pasada iniciaste una aventura en Suiza, cuna del queso y del mito Roger Federer, pero muy alejada del waterpolo de alta competición. Cuéntanos un poco cómo fue la experiencia, cómo llegaste a un país tan exótico y por qué la aventura sólo ha durado una temporada.
«Es cierto. Estuve toda la temporada pasada en un país tan exótico como Suiza. La verdad es que me contactaron muy tarde, y si te soy sincero no sé como definir la experiencia pero te aseguro que no volvería a ese club en mi vida. La falta de profesionalidad era brutal».

– ¿Por qué con todo lo que has sido que es mucho, no estás en un equipo importante o en el staff de la selección española? Cuesta mucho entender que alguien de tu trascendencia esté fuera de esa órbita.
«Paso palabra».

– ¿Quién le debe más a quién? ¿El waterpolo a ti o tú al waterpolo?
«Por mi parte solo puedo decir que yo le debo mucho al waterpolo».

– ¿Te sientes decepcionado de que no se esté contando contigo por ejemplo en el staff de la española, siquiera para poder trabajar con tod@s l@s boyas desde categorías inferiores a las selecciones absolutas?
«Lo que sí te puedo decir es que me gustaría mucho poder estar ahí. Por lo demás paso palabra».

– ¿Has recibido alguna vez una propuesta para entrar en el staff de alguna categoría o tampoco?
«Desde que me retiré, trabajé un verano y nada más».

– ¿Tienes la sensación que en este país no se cuida a los mitos y leyendas como tú, en relación a otros países como por ejemplo Serbia y Hungría?
«Es posible. Creo que esta respuesta ya la han destacado otros muchos ex grandes jugadores y piensan igual».

– ¿Qué puedes ofrecer tú como técnico para cualquier equipo o selección que esté interesada en tu servicios? ¿Por qué habría que confiar en ti?
«Creo tener lo suficiente para esta profesión. Estuve en Venezuela con las dos selecciones nacionales y quedaron muy contento con mi trabajo. De paleta no tengo idea pero de waterpolo creo que algo sé (creo yo)».

– Después de toda una vida como jugador y ya bastantes años como entrenador, ¿dónde has disfrutado más? (me refiero si como coach o como jugador?
«Evidentemente como jugador por todos los años que pasé y por todo lo vivido, el CNB (al que considero mi club) y luego en el CN Terrassa (mi casa)».

– La leyenda Joan Jané te trajo a España. ¿Cómo describirías tu relación con él? ¿Alguna anécdota interesante entre los dos? Seguro que debes tener varias.
«Una muy buena relación de años, pero si me lo permites, las anécdotas me las guardo jajajaajaj».

– Te he preguntado por Joan Jané, pero tu vida en Barcelona está muy ligada al gran Toni Esteller, tu entrenador durante tantos años en el CNB. Cuéntanos un poco cómo era jugar para Toni y cuáles eran sus virtudes, para que todo el mundo afirme que era un entrenador especial, diferente. ¿Alguna anécdota a resaltar de tus años con él?
«Toni es una persona muy especial para mí. Te deja jugar y confía mucho en los jugadores. Su apuesta por los jóvenes es brutal. ¿Una anécdota? Fue en la primera champions a mi llegada al CNB. Jugamos contra el Posilipo que justamente eran los campeones del año anterior y un equipo fortísimo. Por nuestra parte se trataba de un equipo muy renovado y en proceso de crecimiento. Así que Toni dijo “El objetivo del partido es marcar un gol”. Imagina mi cara al oírlo, jajajaaj. El primer gol del partido fue mio. Salí y le dije “Ya está. Objetivo cumplido”. Y Toni se partió el culo, ajajajaja».

– ¿Cuál es el jugador más duro que te ha defendido nunca y que cada partido era una guerra entre los dos?
«Sin lugar a dudas Dejan Savic. Dejan era un jugador muy completo, con una fuerza enorme y una técnica buenísima, que hacía muy complicado jugar contra él».

– ¿Y cuál ha sido el mejor defensor al que no querías encontrarte nunca, porque te hacía la vida imposible? ¿O no lo ha habido nunca?
«Sí, sí, claro que lo había. Vlado “The boss” Vujasinovic. Un jugador prácticamente perfecto; tenía muchas piernas, muy buen lanzamiento, dirigía al equipo, inteligente como pocos, etc. Sin lugar a dudas se trata de uno de los mejores jugadores de la historia del waterpolo».

– Estuviste un único año en el extranjero, en Brescia. ¿Por qué un jugador tan top como tú solo jugó un año fuera? ¿Tan bien se pagaba en España para no aceptar ninguna oferta más? ¿Puedes decirnos qué otros equipos extranjeros importantes te hicieron alguna oferta en algún momento dado?
«Sencillamente porque estaba muy cómodo en Barcelona con la familia y el dinero no era lo más importante. Los equipos que más se interesaban por mí por entonces eran italianos. La verdad es que tanto Posilipo como Roma me hicieron grandes proposiciones. Aparte del Brescia, claro».

– Hablando de Brescia, ¿Fue ahí dónde te mordieron? Creo que se montó una muy buena, siendo noticia ese suceso en todos los periódicos deportivos italianos. ¿Cómo ocurrió todo, quién fue y si luego en el partido de vuelta o más adelante hubo vendetta?
«¿No querías anécdotas? Fue en la nariz jugando en Napoles contra el Posilipo (este equipo estaba siempre al pie del cañón por entonces). El jugador en cuestión era Fabrizio Buonocore y solo te puedo añadir que era un jugador lamentable. Se montó una buena, si».

– Has sido un jugador diferencial allá dónde has estado. Durante muchos años te codeaste con los mejores jugadores del mundo. ¿Ganaste mucho dinero siendo jugador? ¿Qué lujos te has podido permitir con las ganancias obtenidas de jugador con el waterpolo?
«Lo normal pero lujos, ninguno. Tú lo has dicho muchas veces y creo que en la anterior entrevista, Anni Espar, lo corroboró. Tristemente los ingresos en waterpolo son escasos».

– Y ahora como entrenador durante ya una década ¿Ganas más ahora o antes cuándo jugabas?
«Con diferencia antes».

– Viendo la actualidad en este país en cuanto a salarios a los entrenadores, y salvando cuatro o cinco puestos ¿Consideras la profesión de entrenador de waterpolo como eso mismo, una profesión, o es más una «supervivencia» diaria?
«Supervivencia pura y dura. Me encantaría decir lo contrario pero a día de hoy es así, exceptuando como bien dices cuatro o cinco puestos».

– Cuenta la leyenda que tú realmente no eras zurdo jugando, sino un diestro que en algún momento alguien convirtió en zurdo, similar a Rafa Nadal en tenis. ¿Qué tiene de cierto esta leyenda y de ser así, puedes contar cómo fue ese cambio?
«Sí, sí, totalmente cierto, jajajaaja. Ocurrió con 8-9 años y fue de casualidad ya que un día entrenando me puse a pasar con la izquierda y me mandaron por 1-2».

– ¿Te llamó en algún momento alguna selección para nacionalizarte con ellos, jugando ya para España? Te lo comento porque aunque parezca surrealista, una de las cosas del día a día del waterpolo mundial, es que un año puedes jugar con Italia, el siguiente con Perú y uno más tarde con Camerún. Esto no pasa en ningún otro deporte que se precie. Si te llamaron ¿Puedes decir qué selección o selecciones fueron, qué condiciones te ofrecieron (otra leyenda dice que al australiano Pietro Figliori le dieron para jugar con Recco y con Italia, la suma de 1 millón de dólares) y por qué dijiste que no?
«La verdad es que no. Solo me llamaron para jugar en Italia pero creo que si hubiera ido me lo hubieran propuesto seguro. Lo de Pietro no tengo ni idea».

– ¿Sabes qué te ofrecería yo si tuviese la oportunidad de decidir? Te haría embajador de nuestro deporte. Serías la imagen itinerante de nuestro deporte. Nunca vi a un jugador o jugadora dentro del circuito internacional, dónde todo el mundo, grandes y pequeños, se acercaran para hacerse una foto contigo. Tienes un carisma especial y que habría que aprovechar. ¿Te gustaría un rol así aunque te tuviese alejado de los banquillos? (Aquí hago un inciso curioso y personal porque seguro que la gente ya no lo recordará. En la primera entrevista de Charla con Passion entrevisté a Chus Martín y le pregunté «¿Por qué nunca has llevado ninguna selección nacional, ni siquiera en categorías? Varios entrenadores que llevan equipos en división de honor tanto en chicas como en chicos, sí lo han hecho. ¿Nunca te lo han ofrecido o nunca has querido compaginar?» a lo que me contestó «Pues la verdad que por mí no ha sido. Siempre he reconocido que me gustaría trabajar para las selecciones nacionales, pero nunca me lo han ofrecido y esta es la verdad». Bien, ¿sabéis dónde está Chus ahora? Sí, llevando la selección nacional junior masculina en el campeonato de Europa de Montenegro. ¿Casualidad? Por supuesto aunque también es cierto que no es la primera vez que me adelanto en mis RRSS a algo que luego ha pasado, jaja).
«La verdad es que no me importaría. Por mi deporte lo que sea».

– ¿Qué tal fue la experiencia de entrenar tanto a la selección masculina como femenina de Venezuela? Una vez haber podido trabajar tanto con chicas como chicos ¿Qué diferencias has encontrado entre un grupo y el otro? Me conformo con que me digas lo mejor de cada grupo.
«Fue una muy buena experiencia y repetiría pero el país a día de hoy está fatal. Las chicas tenían muchas ganas de hacer algo y al final llegaron los resultados. Los chicos también pero iban de “enterados” y muchos no tenían ganas de nada».

– Jugaste hasta los Juegos Olímpicos de Londres 2012, con más de 40 años y con muchos dolores físicos, especialmente en la espalda si no me equivoco. ¿Por qué no te retiraste antes si ya habías cumplido deportivamente a todos los niveles? ¿Te arrepientes de haber apurado tanto?
«No, no me arrepiento de nada. Me veía con ganas y además tenía una apuesta con mi padre de que haría una olimpiada más, ya que él tiene 3, jajajajaja (Os invito a indagar sobre la vida deportiva del padre de Iván)».

– Cuba es un país con una gran cultura deportiva, siendo el béisbol el deporte nacional y el boxeo el que más oros olímpicos ha dado a tu país de origen. Siendo un coloso físico como eres, la verdad que no te veo haciendo ningún home run (béisbol) pero en cambio sí que te imagino emulando a las grandes leyendas cubanas y mundiales como Teófilo Stevenson y Félix Savón. ¿Por qué waterpolo y no boxeo? ¿Te llegaron alguna vez a ofrecerte pasarte al boxeo?
«Te sorprenderás porque mis comienzos fueron en el baloncesto y la verdad es que me gustaba, pero como dicen en Cuba “hijo de gato caza ratón”. Y tiró mas el waterpolo».

– Para acabar y no hacer más larga la entrevista te pediría que dijeras quién ha sido tu mejor amigo dentro del waterpolo, con quién te has reído más en un vestuario, quién ha sido el mejor jugador que has visto entrenando en tu vida y quién ha sido el que mejores pases te daba siempre a la boya.
«Mejor amigo, muchos. Sería injusto decir un nombre. Con quien me he reído más ha sido con Jesús Rollán y los mejores pases a la boya, sin duda Dani Ballart y Felipe Perrone».

También podría gustarte
¡Suscribete a WATERPOLISTA.com totalmente GRATIS!
Disfruta de todas las novedades que se publican en WATERPOLISTA.com y muchas ventajas que irás recibiendo semana tras semana.