Juan de Dios Cano hace oídos sordos a las dificultades

Hace algo más de dos años que Juan de Dios Cano Hernández (sus allegados le llaman ‘Juande’) empezó a jugar al waterpolo, con la intención de experimentar deportes nuevos y demostrar que la vida esta hecha para superar retos, ya que a pesar de ser un deporte complejo el murciano se ha adaptado a la perfección, y eso que cuenta con una una discapacidad auditiva del 100% desde que nació en noviembre del 2000.»Esto aumenta algo más si cabe la complejidad del juego, pero eso no me echó una para atrás, y es más, me dio más ganas de formar parte de este deporte», comenta a WATERPOLISTA.com este joven deportista que tras iniciarse en el Club Waterpolo Thader, ahora milita en las filas del San Javier, mientras termina sus estudios en segundo de bachillerato. Lo cierto es que esa discapacidad la suple con un implante coclear que le permite oír todo lo que ocurre a su alrededor, pero eso si, no dentro del agua, algo que complica y mucho su participación en el juego.

Un jugador paciente

A pesar de ello Juande se ha sumergido de lleno en el waterpolo, siendo según su opinión «un jugador paciente que espera el momento para destacar«, y que de una manera u otra tiene mil ojos, ya que debe de estar atento de todo el mundo con la intención de poder aportar al juego del equipo y desempeñar su papel dentro del agua. Es por ello que cuando está en pleno partido se centra en fiarse en sus compañeros, y sobretodo en sus movimientos, así como en los que están fuera por si hay un cambio, en las señales del entrenador, en la pelota, los rivales y mucho en el árbitro, que al final es quien marca el devenir del encuentro.

«Tengo que estar pendiente de mil cosas. A veces he perdido pelotas por culpa de esto o me han expulsado por entrar antes de tiempo en la piscina cuando sustituyo a un compañero. Poco a poco voy ganando agilidad, aprendiendo conceptos e igualando mi nivel al de los compañeros«, reconoce el deportista murciano quien tiene claro que el principal reto que debe afrontar a día de hoy se centra en mejorar con cada partido y aprender de todas las derrotas, definitivamente ganar, aunque esto se intenta en todos los partidos, no todo es blanco ni negro, a veces suele ser gris», comenta un jugador que recibe el total respaldo de sus compañeros, quienes le explican y ayudan en cada entreno, mientras considera que los principales inconvenientes que puede suponer es la aceptación de los demás, ya que «gente mala hay en todos lados«. Sin embargo, Juande no se queda con eso, sino con lo que le puede ayudar en su día a día practicar un deporte como es el waterpolo. Por este motivo anima a todos a superarse a si mismo y sin importar los inconvenientes integrarse en este deporte, ya que según reconoce «si no lo pruebas no sabes si te vas a gustar, por lo tanto pruébalo y lo verás, desde fuera de ve un deporte apasionante pero desde dentro aún más«, sentencia.

@etoster