Aún queda mucho que pelear en este ‘partido’

Si cambiamos nosotros, la sociedad cambia. Hoy reivindicamos a todas las mujeres reconocidas y no reconocidas. Hoy reivindicamos a la mujer dentro del waterpolo, nuestro deporte que sigue avanzando, pero a pasos cortos

El machismo sigue presente en nuestra sociedad y por consiguiente en el deporte. Desde WATERPOLISTA.com queremos dar voz a todas ellas y reivindicar su figura en este deporte que es de todos. En esta disciplina de más de 100 años, la mujer ha tenido que luchar mucho más que los hombres para tener un hueco parejo, siendo la introducción en los Juegos Olímpicos uno de los claros ejemplos, ya que la rama masculina empezó a competir en los disputados en París en el 1900 y la femenina en los de Sídney del 2000. Muchos años de diferencia. Jugadoras, entrenadoras y arbitraje llevan en este camino mucho tiempo y las mejoras se van notando pese a no llegar todavía al final de un recorrido en el que todos pondremos nuestro granito de arena para que esté a la vuelta de la esquina.

Está claro que las chicas están en desigualdad en el tema de la cantidad de equipos y debido a la escasez la categoría masculina cuenta a nivel nacional con una división más. Tras los éxitos de nuestra selección femenina se ha incrementado el número de licencias convirtiéndose en un referente gracias a su constancia y sacrificio. La Primera División masculina cuenta con 13 equipos compitiendo mientras que la femenina son dos menos y en cuanto a la Liga Premaat los chicos cuentan con un equipo más que las chicas, lo que llevaría a plantearse porqué hay clubes que tienen solo plantilla absoluta masculina, pero no femenina. Añadiendo que también hay pocas mujeres en cargos directivos o estamentos deportivos, hecho que debería cambiar.

De los diez conjuntos que compiten en la Liga Premaat femenina cuatro cuentan con la presencia de la mujer en el banquillo y tan solo dos como primeras entrenadoras. Una de ellas es Marina Zablith que dirige el primer equipo del CN Mataró por segunda temporada consecutiva y Mar Rodríguez en el CDN Boadilla contando con Miguel A. González como segundo. Los otros dos equipos que disponen de esta presencia fuera del agua son el CE Mediterrani con Marian Díaz como segunda de Marc Comas y la Escuela Wp Zaragoza con Paula Esteban como ayudante. Por lo que esta realidad debería llevar a pararse y analizar la preocupante superioridad de entrenadores hombres en una liga femenina. Además, destacar que en la Liga Premaat masculina no existe la presencia de mujeres ni como primeras entrenadoras ni como segundas.

Pasando a la Primera División femenina, de los once equipos cuatro tienen primeras entrenadoras dejando la elevada cifra de siete equipos con varones como técnicos, lo que sigue siendo una barbaridad. En esta división Paula Esteban sí toma los mandos del segundo equipo absoluto de la Escuela Wp Zaragoza, Astrid Álvarez con el Real Canoe y Bea Espinosa dirige de AR Concepción Lineal formando parte también junto con Carla Fargas y Marian Díaz del staff técnicos de las selecciones españolas de categorías. Por último, Miriam López Escribano en el CNM Cuatro Caminos. Pese a que actualmente en la categoría masculina de esta división no hay ninguna mujer como técnico cabe destacar que Lorena Miranda el año pasado fue la primera entrenadora en llevar las riendas de un equipo masculino en España, siendo el CN Caballa el club afortunado de este avance histórico en nuestro deporte.

El ámbito arbitral

Ser árbitro es difícil en waterpolo y en cualquier deporte, pero si le añades ser mujer aun se complica más. Se puede ver la escasez de mujeres árbitro de nuestro país en el cuadro de árbitros del Comité Nacional (CNA), siendo 88 el total de integrantes y de ellos tan solo 10 son mujeres, una más que hace dos años. Marta Cabanas junto con Yolanda Ruiz son las únicas que pitan en la categoría A, la más alta de todas. Apolonia Baños y Rosa Rodriguez se sitúan en la categoría A1, Ana Aguilera y Mª Teresa Pascual en la C, siendo la categoría B la que más mujeres reúne (Emma Campos, Marina Fernández, Ana Belén Gonzalvo y Carla Martin).

Una de las razones por las que hay tan poca presencia femenina en el arbitraje es debido a la incapacidad de soportar discriminaciones por pertenecer a este gremio, por si no fuese poco también se reciben comentarios machistas. Marta Cabanas aseguraba a waterpolista.com hace varios meses que se ha sentido discriminada por ser mujer en muchos partidos y añadía que ha hecho cursos de arbitraje con otras compañeras que actualmente no trabajan de ello debido a no poder sobrellevar ciertos comentarios. La realidad es que ninguna de ellas tendría que aguantarlos y “vivir con ello”. Uno de los avances de este sector fue el año pasado cuando en la Copa de la Reina 2019 Yolanda Ruiz y Ana Belén Gonzalvo arbitraron por primera vez una final de copa. En un periodo más reciente comprobamos que en las copas jugadas hace unas semanas también tuvieron un papel importante, siendo Marta Cabanas una de las responsables de pitar la final de los chicos y Carla Martín la de las chicas.

Es un día para luchar y reivindicar, pero no solo es este día, el camino se recorre el resto del año también, una carrera de fondo que hacemos y debemos seguir haciendo todos los que amamos el deporte, el waterpolo y a las mujeres. Si cambiamos nosotros, la sociedad cambia. Hoy reivindicamos a todas las mujeres mencionadas y no mencionadas. Hoy reivindicamos a la mujer.

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