Dani Hernández cuelga el gorro

Decir adiós a un gran amor nunca es fácil y más si llevas junto a él toda una vida. Tiempo en el que has vivido buenos y malos momentos, alegrías y decepciones, éxitos y fracasos. Esto es lo que le ha pasado a Dani Hernández que tras quince años de fraternal relación con el waterpolo profesional ha decidido dejarlo a un lado para centrarse en otra de sus grandes pasiones: la fisioterapia tras recibir una oferta para trabajar con Francesc Sucarrats en L’Estudi Vic que «no podía rechazar».

A sus 33 años, el deportista catalán no ha perdido su clase tal y como vino demostrando a lo largo del vigente curso en el CE Mediterrani de Marc Comas, donde jugó tras verse obligado el pasado año a abandonar el CN Sant Andreu, en el que no sólo era capitán, sino una pieza clave en el complicado puzzle del que fue entre otras cosas campeón de la Supercopa de España en 2014. Y es que al fin y al cabo de sus quince temporadas en la máxima categoría, trece fueron defendiendo el escudo del CNSA.

La decisión es definitiva e incluso «a corto plazo no es una opción» seguir jugando a otros niveles, puesto que tal y como reconoce el propio deportista a WATERPOLISTA.com «esta nueva faceta laboral requiere una dedicación total y no hay espacio para el waterpolo». Sin embargo, tomar una decisión de tal calado nunca es fácil y más cuando te ha aportado tanto en tu día a día. «Excepto altas cantidades económicas, me ha aportado muchas cosas: valores, amistad, momentos únicos, diversión…», recalca.

twitter-bird@etoster

También podría gustarte
¡Suscribete a WATERPOLISTA.com totalmente GRATIS!
Disfruta de todas las novedades que se publican en WATERPOLISTA.com y muchas ventajas que irás recibiendo semana tras semana.