En ocasiones, la incertidumbre, el miedo a equivocarnos, y/o salir de la zona de confort, nos impide crecer, nos impide soñar, nos impide volar. Lamentablemente, nos estamos confundiendo. Charles Chaplin decía: “me gustan mis errores, no quiero renunciar a la libertad deliciosa de equivocarme”. Precisamente, el error se convierte en nuestro aliado, en una nueva oportunidad de cambio, y en una experiencia más de aprendizaje. No dejamos de aprender, no debemos de olvidarlo. Por esta razón, debemos de disfrutar del proceso, del día a día, del hoy, buscando la satisfacción personal. Crecer y descubrir, fallar y aprender. Aprender a desaprender.
Una misma razón
Así, el gran objetivo de esta sección es aprender, desaprender y reaprender. Entre todas y todos. Por suerte, compartimos un vínculo emocional muy significativo, la admiración hacia el waterpolo y todo lo que ello engloba (deportistas, entrenadoras y entrenadores, familias, Clubes Deportivos, etc.). Tenemos ante nosotras y nosotros un reto emocionante: la posibilidad de seguir construyendo nuestro deporte, juntas y juntos.
Desde un marco científico, nuestra idea es hablar y debatir sobre diferentes temas interesantes e influyentes en nuestra modalidad, tales como las lesiones deportivas y su prevención, o los perfiles antropométricos del waterpolista de élite, entre otros. No obstante, estamos abiertos a sugerencias. Ese el camino y la meta. Eso es aprender a desaprender. ¡Comencemos!