La década prodigiosa

Un repaso por una exitosa etapa entre los años 2011 y 2021 en el que un grupo de jugadoras han protagonizado un camino repleto de medallas donde la pasaba equipo se ha puesto en valor

La selección española de waterpolo ha cerrado su participación en los Juegos de Tokio con la medalla de plata. Ser subcampeonas olímpicas cuando delante tienes al ‘Dream Team’ de Estados Unidos supone ser las mejores del resto del mundo. Eso sí, cuando has adquirido desde pequeñas el gen competitivo de ganar, las lágrimas por la medalla de plata te hacen ver que estas jugadoras y este seleccionador no se conforman con eso. Por eso han grabado sus nombres desde el 2011 y los éxitos han llegado año a año en esta década prodigiosa hasta diez años después en Tokio.

De entrada el núcleo donde nació esta maravillosa generación de waterpolistas ganadoras tuvo la semilla el 23 de abril del 2011. Ahí llegó el primera Copa de Europa para el CN Sabadell convertido en el factor diferencial junto a la ayuda en estos años de Mataró, Mediterrani, Sant Andreu, Terrassa y un Rubí, que ejemplifica como pocos la calidad desde la base. Laura Ester, Anni Espar, Clara Espar, Pili Peña y Maica García, cinco de las 13 ganadoras de la plata en Tokio’2021 ganaron la primera Copa de Europa hace diez años. Cinco de ellas – Clara no estuvo – junto a Roser Tarragó y Marta Bach – son las siete waterpolistas que han sumado dosd platas en Londres’2012 y Tokio’2021. Cuando empezó la década prodigiosa, hace 10 años, Maria Elena Sánchez tenia 16, Bea Ortiz, Irene González y Judith Forca,14, Paula Leiton 10 y Elena Ruiz tan solo seis. Diez años después disfrutan de la gloria olímpica reflejadas en sus compañeras que abrieron camino.

| La influencia sabadellense

Ahí comenzó el camino trasladado a la selección. De Nani Guiu, entrenador por el entonces del Sabadell, a Miki Oca que gestionó muy bien ese trasvase. Aquel Preolímpico del 2012 fue el primer paso para llegar a la cita olímpica de Londres. Entonces fueron seis waterpolistas del Sabadell con Laura Ester, Anni Espar, Pili Peña, Maica García – cuatro de las olímpicas en Tokio – más Mati Ortiz y Jennifer Pareja. Junto a ellas, la madrileña Laura López fueron el equipo títular de aquella final. Roser Tarragó y Marta Bach – dos más de las seis waterpolistas que tienen doble plata – más Ona Messeguer, Ana Copado, Andrea Blas y Lorena Miranda completaban aquel equipo que cedió por 8-5 ante Estados Unidos. Ahi con 19 años, Maggie Steffens inició su triplete de oros.

En el Mundial del 2013, la selección española femenina de waterpolo llegó a su climax. Campeonas del Mundo en Barcelona tras ganar a Australia en la final, a Hungría en semifinales y sobretodo a Estados Unidos en cuartos de final. Los que estuvimos aquel lunes torrido en la Picornell de Barcelona vimos posiblemente el partido más perfecto. Aquel Mundial de Barcelona fue el último título que se dejó ir Estados Unidos. Desde entonces, tres Mundiales -2015,2017-2019 – y dos Juegos-2016 y 2021-. Y desde entonces España siguió creciendo. Campeona de Europa’2014 y 2020, Subcampeona del Mundo’2017 y 2019 y subcampeona olímpica en 2021 y bronce en el Europeo de Barcelona’2018. Eso a nivel de selección. A nivel de equipos – cinco Copas de Europa para el CN Sabadell – una Copa LEN para el Mataró – y un crecimiento a nivel de liga que permite aventurar la continuidad de los éxitos. La cantera del Rubí, con la joven Elena Ruiz a sus 16 años es el mejor ejemplo. De ahí, salió también Bea Ortiz. Eso sí para que la década prodigiosa tenga continuidad se necesita que los organismos se acuerden de la labor que hacen todos los clubs para que esta cantera de éxitos tenga continuidad.

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